Cuando el Gobierno presentó su iniciativa de género marcó, entre otros puntos, las brechas de acceso al financiamiento, uno de los ejes en los que se trabaja en Producción y Hacienda, aunque la primera etapa estuvo centrada en relevar la magnitud del problema. Los datos se presentaron en una reciente reunión del Centro de Desarrollo Económico de la Mujer, Cedem, que dirige Helena Estrada.
La coyuntura económica y la inestabilidad del contexto son el principal desafío para poder gestionar las empresas, un aspecto más destacado por las mujeres (36,8%) que por los hombres (24,6%).
En los datos sobre mujeres empresarias marcaron que “el género, a priori, no es reconocido como una variable determinante para administrar mejor una empresa”. Pese a eso, 5 de cada 10 mujeres y 6 de cada 10 hombres consideran que la mujer afronta mayores desafíos para dirigir la empresa. En general, estiman que tiene el mismo acceso a la información financiera que el hombre (86,8%) y aunque en menor medida acuerdan con la igualdad de acceso a la propiedad, al crédito y la inversión (68,7%).
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Así lo marca un estudio sobre el segmento pyme y de mujeres realizado por el IAE Business School, M&F y la Corporación Financiera Internacional del Banco Mundial (IFC, según sus siglas en inglés), que señala que es necesario reducir trabas burocráticas en la Ciudad de Buenos Aires y mejorar el acceso a la información en otras regiones como el Noroeste, el Noreste y el Sur.
Según el análisis, se necesita inversión en la educación financiera de las mujeres, pero también formar al personal bancario para evitar el sesgo en el acceso financiero. También recomendaron a la banca diseñar instrumentos para los diferentes ciclos de la vida de las mujeres y la familia.
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Soluciones. Consultados sobre cómo desarrollar empresas a cargo de mujeres, el 37,3% consideró que el Estado debería realizarlo a través de programas de apoyo específicos a las empresas dirigidas por mujeres, un 38,3% opinó que las cámaras empresarias se tendrían que ocupar de hacerlo y un 40,6% que el sistema financiero debería considerar productos que apoyen de manera específica a las empresas dirigidas por mujeres.
En líneas generales, marca que hay fomentar el conocimiento de la ley pyme fuera de la Ciudad y mejorar la calificación para el financiamiento en las pyme bonaerenses. “Hay que intentar captar nuevos rubros como el agro, que prefieren otras opciones al financiamiento bancario para las inversiones productivas y también más pymes del sector servicios para las que el crédito comercial es la principal alternativa de financiamiento del ciclo operativo”, sostienen.
