Hasta el 8 de diciembre se expone en la Sala "La Cantina" del espacio Munar Arte la muestra "Emboscada" que reúne una selección de obras en distintos formatos de Andrés Waissman.
En un espacio que se vale de las luces y las sombras para generar una atmósfera con reminiscencias místicas, el visitante es recibido por una serie de esculturas inquietantes que sugieren cuerpos antropomórficos y animales fantásticos en actitudes acechantes.
Las texturas hacen foco en el proceso continuo de desintegración de la materia y ponen de manifiesto el carácter efímero de la existencia desde una mirada insinuante que se vale de las formas y el relieve.
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Por otra parte, esa realidad fugaz se hace presente en la interpretación personal de Waissman de los bosques quemados sobre papel en blanco y negro y en el video que muestra el proceso de oxidación de la viruta.
Las figuras contenidas en cajas se presentan ambiguas, con bordes desdibujados, están comprimidas y la conciencia del espectador decide si reposan dóciles como los restos yacentes y malogrados de un monje sepultado en una catedral medieval o si pugnan por liberarse del ahogo y la opresión.
Pinturas de gran formato dialogan con figuras zoomórficas en la muestra de Weissman. (Foto: María François).
De esta forma, con la ayuda de las cortinas que dividen la sala, en el recorrido se descubren nuevos espacios que se transforman en una escenografía teatral propicia para un ritual.
"La última figura me recuerda a Saturno devorando a su hijo", reconoce Waissman en diálogo con Perfil.com. Y es muy probable que, de forma visceral, algo del mito se haya filtrado en la escultura durante el proceso de creación y emerja como un resto arqueológico de las vivencias personales del artista.
Las figuras de los bosques quemados y la video-instalación que forman parte de la muestra. (Foto: María François).
Munar
El espacio Munar Arte surgió en 1989 por iniciativa de Ariel Benzacar en el subsuelo de la Galería Ruth Benzacar con el objetivo inicial de promover el vínculo entre el arte contemporáneo y el diseño.
En la actualidad funciona en el barrio de La Boca en el mismo lugar en que existieron dos cantinas tradicionales y es dirigido por Diego y Florencia Benzacar con la dirección artística de Carlos Herrera.
Foto: María François
Además de las dos salas de exposición que están en la planta baja, Munar cuenta con un espacio común de producción en que trabajan nueve artistas por invitación del espacio que busca de esta forma promover y potenciar la creatividad de artistas emergentes.
El espacio sigue en expansión y proyecta construir un auditorio y una sala de exposiciones para muestras interdisciplinarias.
Foto: María François.
La muestra Emboscada de Andrés Waissman puede visitarse hasta el 8 de diciembre en Munar Arte, Av. Don Pedro de Mendoza 1555, en el barrio de La Boca de miércoles a domingo de 13.00 a 18.00.
Quienes visiten la muestra también podrán ver la exposición "Información Agregada" de Juane Odriozola que se exhibe en la Sala "El Pescadito" del mismo espacio.
