La automotriz británica Aston Martin debutó con poco éxito en la bolsa de Londres. Los inversores retrocedieron ante un precio de venta que dejó al fabricante de automóviles del Reino Unido a la par de su competidor italiano más grande y más rentable, Ferrari NV.
La acción cayó 6,6 por ciento este miércoles desde el precio de su salida a bolsa de 19 libras (US$24,7), cifra que dio a la compañía con sede en Gaydon, Inglaterra. La valoración de Aston Martin era de 20,7 veces las ganancias del primer semestre, según datos de Bloomberg, cercana al múltiplo actual de la acción de 21 veces las ganancias 2018 previsto para Ferrari, que también tiene un balance general más sólido. Ambas cifras están más en consonancia con las compañías de bienes suntuarios que con otros fabricantes de autos.
“Le pusieron un precio bastante bueno, obteniendo esa valoración”, dijo Arndt Ellinghorst, analista de Evercore ISI en Londres. “Por ahora, no queda más que esperar a que vean las cifras y estén dispuestos a asumir más riesgo”. La marca británica, conocida actualmente como Aston Martin Lagonda Global Holdings Plc, intenta expandir su presencia en el mundo de los autos deportivos con los modelos Vanquish, Vantage y DB. También está reviviendo el nombre Lagonda para incursionar en el segmento compartido por Rolls-Royce Motors y Bentley, rivales del Reino Unido.
Sed de lujo
El máximo responsable, Andy Palmer, dijo estar “encantado” con la respuesta a la salida a bolsa. La describió como un hito para la empresa y prometió cumplir con los planes de crecimiento. La fijación del precio fue impresionante desde el punto de vista de Aston Martin pero “demasiado cara” considerando los antecedentes de pérdidas históricas y los objetivos futuros que dependen de que la compañía replique el desempeño de Ferrari luego de su inscripción de valores de 2015, dijo Ellinghorst. También pone en evidencia que el entusiasmo por las acciones en el área del lujo no se ha atenuado.
Para otros inversores, el riesgo de ejecución de las operaciones y circunstancias macroeconómicas susceptibles de sacudir a la compañía en el futuro, como las repercusiones de la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea, continúan siendo un factor de disuasión demasiado grande por ahora, dijo.
Aston Martin, que adquirió fama gracias a su inclusión en la serie de películas de espionaje de James Bond, redujo sus ambiciones en la salida a bolsa esta semana, achicó la banda seleccionada y recortó el extremo superior un 11 por ciento. La banda reducida fue de 18,50 a 20 libras por acción, según un pliego de condiciones enviado por correo electrónico, en tanto el precio final se ubicó 15 por ciento más abajo que el máximo a que se apuntaba inicialmente.
Los inversores salieron, no obstante, con una rentabilidad 10 veces superior gracias a la reestructuración del fabricante de autos, históricamente generador de pérdidas, luego del arribo de Palmer en 2014, en la medida que el ex ejecutivo de Nissan Motor Co. lanzó cada año nuevos modelos y se propuso duplicar la producción a 14.000 autos anuales.
Propietarios como la firma de inversiones italiana Investindustrial SpA y los inversores kuwaitíes Adeem Investments y Primewagon vendían 27,5 por ciento del capital accionario, con una opción de sobreadjudicación, para una magnitud de oferta de 1.190 millones de libras.
Las acciones de la compañía se negociaban 4,6 por ciento más abajo en 1.813,40 peniques a las 10:25 en la capital del Reino Unido.
Esta incorporación de valores marca la primera salida a bolsa de una empresa automotriz del Reino Unido en más de tres décadas, desde que Jaguar se escindió como compañía independiente en tiempos del gobierno de Margaret Thatcher en 1984.
