El déficit presupuestario de EE.UU. aumentó a US$684.000 millones en los primeros 10 meses del año fiscal luego que disminuyeran los ingresos provenientes de impuestos corporativos.
La brecha fiscal aumentó en 21 por ciento de octubre a julio en comparación con los US$566.000 millones de un año antes, informó el viernes el Departamento del Tesoro en un comunicado. Mientras los ingresos generales aumentaron 1 por ciento en el período a US$2.770 millones, los ingresos derivados de impuestos corporativos cayeron 29 por ciento a US$166.000 millones. El gasto aumentó 4,4 por ciento a US$3.450 millones.
Los datos destacan las preocupaciones de que los recortes fiscales de los republicanos promulgados este año, que redujeron la tasa corporativa del 35 por ciento al 21 por ciento y también los niveles del impuesto personal a la renta, aumentarán el déficit. La administración Trump dijo que un mayor crecimiento económico ayudará a pagar por los recortes de impuestos.
La recaudación individual del impuesto a la renta aumentó a US$1.420 millones en los primeros 10 meses del año fiscal, desde los US$1.310 millones en el mismo período del año anterior, según los datos del Departamento del Tesoro. La Oficina de Presupuesto del Congreso pronostica que el déficit del presupuesto federal superará los US$1.000 millones en 2020, en parte debido a la pérdida de ingresos por los recortes de impuestos y el financiamiento de programas sociales. En julio, el déficit presupuestario de la nación de US$76.900 millones superó el déficit de US$42.900 millones registrado un año antes.
