Crisis en Venezuela afecta a mercado global del crudo, dice IEA

La crisis política en Venezuela corre el riesgo de alterar los mercados mundiales de crudo, ya que el tipo de petróleo extraído por el miembro de la OPEP se vuelve cada vez más escaso, según la Agencia Internacional de Energía (IEA).

Estados Unidos, el mayor cliente de Venezuela, está prohibiendo las importaciones de petróleo de ese país, ya que condena al presidente Nicolás Maduro por aferrarse fraudulentamente al poder después de unas disputadas elecciones. La producción de Venezuela ya está en su nivel más bajo en décadas, puesto que la crisis económica en espiral hace mella en la infraestructura del petróleo.

Mientras que los mercados globales se siguen abasteciendo cómodamente, la interrupción en Venezuela representa una amenaza porque la producción del crudo más pesado y con mayor contenido de azufre que extrae se está reduciendo en otros lugares, dijo la IEA en un informe mensual. La Organización de Países Exportadores de Petróleo está recortando la producción para evitar un superávit mundial, mientras que el país miembro Irán recibe sanciones por parte de Estados Unidos.

"En términos de cantidad de crudo, los mercados podrían ajustarse después de los desplazamientos logísticos iniciales", señaló la IEA, con sede en París, que asesora a las principales economías en materia de política energética. "La calidad del petróleo es otro tema y, en el contexto más amplio de la oferta en la primera parte de 2019, es aún más importante", comentó.

Los precios del petróleo se han mantenido estables cerca de los US$60 por barril en Londres, incluso a medida que aumenta la agitación en Venezuela, ya que los mercados funcionan a través de abundantes suministros acumulados el año pasado, señaló la AIE. Sin embargo, un déficit de crudo agrio puede generar complicaciones para muchas refinadoras, como las que se encuentran a lo largo de la costa del Golfo de EE.UU., configuradas para procesarlo.

Las provisiones de crudo agrio son comunes en la OPEP, cuyos miembros iniciaron una nueva ronda de recortes de producción el mes pasado. El grupo tuvo un sólido comienzo en la estrategia, reduciendo la oferta en 930.000 barriles por día a su nivel más bajo en casi cuatro años, dijo la IEA.

El cártel está en vías de mantener los mercados equilibrados este año, a pesar de que la demanda de crudo será menor de lo que se pensaba anteriormente, consignó el informe de la IEA. La OPEP extraía alrededor de 30,8 millones de barriles por día en enero, un poco más de los 30,7 millones requeridos en promedio en 2019.

La estimación de cuánto crudo se necesita de la OPEP se redujo en 300.000 barriles por día frente a la evaluación del mes pasado en medio de los crecientes suministros de sus rivales, impulsados por el auge del shale en Estados Unidos. El crecimiento de la oferta en EE.UU. este año superará la producción total de Venezuela, indicó la IEA, otra señal de que los esfuerzos de la OPEP para alentar los precios pueden finalmente resultar contraproducentes.

La IEA mantuvo sin cambios los pronósticos de la demanda mundial de petróleo, pese a las señales de desaceleración del crecimiento económico, ya que el consumo sigue respaldado por los precios más bajos del crudo y el inicio de proyectos petroquímicos en China y Estados Unidos.