Economía de España sigue siendo un punto brillante en eurozona
España seguía siendo un punto brillante en la economía de la zona euro a finales de 2018, aunque el país, al igual que el resto de la región, se enfrenta un panorama más débil este año.
Spanish economy grew more than forecast in fourth quarter |
Jeannette Neumann
España seguía siendo un punto brillante en la economía de la zona euro a finales de 2018, aunque el país, al igual que el resto de la región, se enfrenta un panorama más débil este año.
El crecimiento se aceleró inesperadamente al 0,7 por ciento en el cuarto trimestre, en contraste con las cifras informadas por Alemania, Francia e Italia, donde las tensiones comerciales, las protestas violentas y las tensiones presupuestarias obstaculizaron el crecimiento. La producción española estuvo impulsada por el gasto del consumidor y del Gobierno y el aumento de las exportaciones. El gasto del Gobierno aumentó por el impulso a la contratación de la Administración socialista. La inversión disminuyó.
"La demanda interna ha sido muy sólida, muy intensa", dijo María Jesús Fernández, economista de Funcas, un centro de análisis de Madrid. Impulsada por el aumento del empleo, esa fortaleza "es la razón de un crecimiento más fuerte" comparado con otros países de la UE, dijo.
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La economía de España ha mantenido su impulso ante unas perspectivas cada vez más inciertas, logrando su vigésimo trimestre consecutivo de expansión y un crecimiento anual del 2,5 por ciento. Pero la incertidumbre política ha aumentado en la cuarta economía de la zona euro ante las dificultades del presidente Pedro Sánchez para aprobar un plan de gastos para 2019. España tampoco es inmune a los vientos en contra que azotan a sus vecinos europeos.
El banco central de España anticipa una expansión del 2,2 por ciento en 2019, pero el gobernador Pablo Hernández de Cos dijo a principios de esta semana que la desaceleración en la región plantea riesgos a la baja para el panorama interno. La economía de Italia podría haber caído en recesión a finales del año pasado.
Los lastres al crecimiento económico de la zona euro, que inicialmente parecían solo temporales, han demostrado ser algo más problemáticos. El estancamiento de la demanda en China significa que los fabricantes de automóviles de Alemania siguen teniendo dificultades tras casi hundir la economía en una recesión. Las ventas minoristas de diciembre en Alemania cayeron más de lo previsto, mientras que la actividad empresarial en Francia sufrió el impacto de las protestas de los "chalecos amarillos".
El Fondo Monetario Internacional recortó su pronóstico para la zona euro en 2019 al 1,6 por ciento la semana pasada, 0,3 puntos porcentuales menos que en octubre. Se anticipa que las tres principales economías de la región se expandan menos.
La ministra de Economía de España, Nadia Calvino, dijo en una entrevista de radio en la cadena Onda Cero que España comenzó el 2019 con buen pie y que tiene un marco de crecimiento sólido que espera se mantenga durante todo el año.
