México celebrará consultas públicas este fin de semana para decidir sobre 10 proyectos de infraestructura, incluidos un tren que recorrería cinco estados del sureste y una refinería de petróleo en el estado de Tabasco. El proceso ha afectado a los mercados locales.
Un mes después del referendo que terminó con la cancelación de un aeropuerto de US$13.000 millones en Ciudad de México, las consultas tendrán lugar el sábado y el domingo.
Críticos plantean que el proceso se utiliza como herramienta política. En el referendo del aeropuerto participaron solo 1 millón de personas, menos del 1% de la población mexicana, y lo organizó Morena, partido del presidente electo Andrés Manuel López Obrador. En esta ocasión, el futuro mandatario lleva a cabo una fuerte ofensiva a favor de sus iniciativas predilectas e incluso publicó un video en apoyo al Tren Maya.
"El aumento de la incertidumbre que estas consultas ponen sobre la mesa definitivamente no es bueno para los activos mexicanos", comentó Alvise Marino, estratega de Credit Suisse en Nueva York.
El peso mexicano, en su momento la moneda de mejor desempeño a nivel mundial, ha caído un 5,2% desde el anuncio del aeropuerto el 28 de octubre.
Mario Delgado, coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, declaró tras la decisión del aeropuerto que se aprobará una ley para dar un marco legal a futuras consultas. López Obrador inclusive prometió un referendo sobre la creación de una Guardia Nacional.
Entre los proyectos sobre los cuales se votará este fin de semana se cuentan también programas sociales enfocados en ancianos y discapacitados y una iniciativa de desarrollo del istmo de Tehuantepec.
