Las acciones tecnológicas repuntaron después de que China incrementara el estímulo para combatir la desaceleración del crecimiento. La libra subió más después de que los políticos del Reino Unido votaran en contra del acuerdo del brexit.
El S&P 500 obtuvo su mayor ganancia en más de una semana, superando el nivel clave de 2.600 por primera vez en un mes -el cual no logró superar en tres ocasiones la semana pasada.
El Nasdaq 100 recuperó dos días de pérdidas luego de que China anunciara más medidas para impulsar su economía, aliviando las preocupaciones sobre el impacto de la guerra comercial. Netflix Inc. surgió después de anunciar que planeaba subir los precios, mientras que el resto de las FAANG repuntó en al menos 2 por ciento.
La libra borró una caída frente al dólar cuando los legisladores británicos rechazaron de manera abrumadora el acuerdo del brexit y acordaron realizar una moción de censura al gobierno de la primera ministra, Theresa May, lo cual dio lugar a una especulación sobre la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea y si dicho plan podría descarrilarse.
El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años se negoció en torno al 2,71 por ciento, mientras que el dólar avanzó frente a sus principales pares. El euro cayó luego de que el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, dijera que la economía estaba más débil de lo esperado.
"El mercado actual está reaccionando favorablemente ante la segunda economía más grande del mundo, que en realidad está estimulando y no estrangulando su economía", dijo Brent Schutte, estratega jefe de inversiones de Northwestern Mutual Wealth Management Co. “La tecnología también tiene mucho que ver con lo que sucede en China. El sector tecnológico tiene más ingresos provenientes de China que cualquier otro sector en EE.UU.".
El estímulo potencial en China y la cálida bienvenida que recibió de los mercados refleja el delicado equilibrio que apuntala la recuperación de los activos de riesgo de 2019: los mismos datos macroeconómicos débiles que provocaron una venta masiva a fines del año pasado tienen el potencial de estimular políticas monetarias más flexibles y, por lo tanto, disparar un repunte.
Muchos riesgos están nublando la perspectiva, principalmente el cierre gubernamental en EE.UU. y la frenética cuenta regresiva del brexit. Los inversores también deben tener en cuenta las ganancias corporativas a medida que la temporada de resultados se pone en marcha.
