Switch de Nintendo vacila menos de dos años después de su debut

Nintendo Co. redujo sus perspectivas de ventas anuales de Switch, el mayor indicio hasta la fecha de que a la consola híbrida le cuesta atraer mayor cantidad de usuarios y convertirse en una digna sucesora de la Wii.

Nintendo pronostica ahora que venderá 17 millones de unidades en el año fiscal hasta marzo, en comparación con su estimación anterior de 20 millones y con el promedio de los pronósticos de los analistas de 18 millones. La revisión se produce a pesar de que la compañía con sede en Kioto dio a conocer ganancias superiores a las estimadas durante el trimestre que comprende la temporada de compras de las festividades de diciembre.

La gran pregunta es si Nintendo tendrá que bajar el precio de US$300 de la Switch para conseguir que más gente compre el aparato, que puede usarse en el hogar o fuera de éste. Como en el caso de la PlayStation y las consolas Xbox, una mayor cantidad de usuarios de hardware alimenta una mayor demanda de software, lo que genera un círculo virtuoso de demanda. Hasta ahora, sin embargo, el presidente Shuntaro Furukawa no ha logrado que la Switch se expanda más allá de una base de clientes leales.

“Fue peor hasta de lo que yo esperaba”, dijo Amir Anvarzadeh, analista de Asymmetric Advisors Pte, que viene recomendando la venta de acciones de Nintendo desde mayo. “Nintento no tiene más alternativa que bajar de forma drástica el precio de la Switch y confiar en que todo salga bien”.

Las acciones de Nintendo, que en 2018 cayeron 29 por ciento, han subido 16 por ciento este año sobre la base del optimismo en que la compañía podrá recuperarse. Si bien Nintendo tuvo ganancias y mantuvo intactas sus estimaciones de utilidades para el año fiscal, Furukawa admitió que hacía falta más trabajo para seguir impulsando las ventas de la Switch. Nintendo vendió 9,4 millones de unidades de Switch en el último trimestre, apenas por encima de lo que pronosticaban los analistas.

“No nos esforzamos lo suficiente para comunicar el atractivo del software y el hardware de la Switch”, dijo Furukawa en una reunión informativa tras dar a conocer los resultados.

Las ganancias operativas fueron de 158.600 millones de yenes (US$1.500 millones) en el último trimestre. Los analistas pronosticaban un promedio de 147.000 millones de yenes, según estimaciones que reunió Bloomberg. Los ingresos crecieron 26 por ciento, a 608.000 millones de yenes.

La compañía fabricante de juegos mantuvo su estimación de ganancia operativa de 225.000 millones de yenes para el año fiscal actual, lo que puede compararse con el pronóstico de los analistas de 267.000 millones de yenes.

“Nintendo tiene que ampliar el público de la Switch”, dijo David Cole, fundador y máximo responsable de DFC Intelligence, en una entrevista realizada este mes. “Es todo un desafío de marketing”.

En mayo los analistas pronosticaban que Nintendo vendería 21 millones de unidades de la Switch, pero el promedio de las estimaciones se redujo a 18 millones.