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Cómo reaccionar a la suba de acciones

Después de un 2018 muy duro, las Bolsas de todo el mundo están recuperándose.

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Los inversores deben estar atentos a los diferentes escenarios | Cedoc Perfil

A principios de enero 2019 publicábamos desde Quiena Inversiones un artículo explicando que 2018 fue un año muy duro para las inversiones a nivel global, donde veíamos que las bolsas del mundo acumulaban grandes pérdidas, desde el mercado de EEUU cayendo más de 20% desde sus máximos hasta mercados como el MERVAL de Argentina cayendo más de 50% en dólares.

En los 45 días que van del 2019 la imagen es completamente diferente. El mercado de acciones de EEUU tuvo la mayor suba de los últimos 30 años (11% de suba), y el índice MERVAL subió más de 30% en dólares. Esto corresponde con la suba de todos los mercados emergentes que acumulan 6.7% de ganancia.

Entonces, ¿cómo debemos actuar como inversores ante este cambio de escenario? Es una pregunta retórica, ya que la actitud que debemos adoptar en momentos de suba fuerte es la misma que cuando hay caídas grandes, pero siempre vale la pena reforzarlo.

Nuestro capital de inversión (a diferencia de nuestro capital de especulación, si acaso tenemos uno separado) debe siempre asegurarse de estar bien diversificado, de manera que cuando las acciones caen podamos tolerar una pérdida temporal del capital a cambio de darnos la oportunidad de comprar incluso más durante la caída, tal como sugeríamos para un perfil agresivo de inversor, o simplemente no hacer nada.

Cuando los precios se recuperan, como está pasando en este momento, la actitud debe ser la de mantener nuestro portafolio tal y como está, y hacer pequeños ajustes racionales. Al igual que en nuestro último artículo, vamos a separar las sugerencias a seguir de acuerdo al perfil de cada inversor:

Para un inversor conservador o moderado:

Si nuestro objetivo es conservar el capital o generar ingresos, porque no toleramos grandes sacudidas al valor de nuestras inversiones, lo más acertado (igual que en el caso de una caída) es ser lo más pasivos posible. No hacer nada. Recordemos que durante la caída no hicimos nada, y mantuvimos nuestras inversiones, significa que hoy nuestra cuenta habrá visto una gran recuperación y podemos continuar nuestro plan de largo plazo.

Esta estrategia de no hacer nada durante grandes sacudidas de mercado significa que vamos a ver retornos promedio y moderados durante la vida de la inversión, pero estando tranquilos de que el capital está protegido por la diversificación.

Para un inversor agresivo:

Si nuestro objetivo es ser más agresivos para lograr el mayor crecimiento posible en el largo plazo, entonces podríamos hacer algunos ajustes al portafolio. Recordemos que durante la caída destinamos más fondos a comprar más a precios bajos. Esto significa que a hoy tenemos un portafolio que aumentó fuertemente su valor, y probablemente tengamos más exposición al riesgo en aquellas inversiones que subieron más de valor. Lo ideal es vender parte de las inversiones que compramos en la caída para que el portafolio retome la diversificación que teníamos antes de la caída, pero con mayores ganancias.

Con ese capital libre una sugerencia válida es “rebalancear”, es decir comprar un poco más de aquellas posiciones que aún no muestran una recuperación. De esta forma mantenemos la diversificación, reinvertimos las ganancias, y podemos prepararnos para otro período de posibles caídas.

Como decíamos al final del anterior artículo, estamos viendo los retornos positivos de actuar racionalmente, por lo que las sugerencias de ambos artículos se deben aplicar durante toda la vida de nuestras inversiones, y veremos resultados por encima de los obtenidos por la mayoría de inversores. 

*CEO de Quiena Inversiones