COLUMNISTAS

El factor UNEN y la inteligencia electoral

default
default | Cedoc

El martes pasado el Frente Amplio UNEN se presentó en sociedad. Los resultados de la primera encuesta posterior a ese acto revelan que la presentación nacional del frente resulta auspiciosa para sus pretensiones de constituirse como real alternativa de poder.

Si la inteligencia electoral refiere al diseño inteligente de una estrategia política tendiente a maximizar chances electorales, UNEN estaría dando muestras de poseerla. Analicemos por qué:

UNEN fue el primer espacio político que comprendió que las PASO eran una oportunidad para sumar. En efecto, si la Ley de Lemas y las listas colectoras lo posibilitaban, ¿por qué no intentarlo con las PASO?

Si el fracaso de la oposición en 2011 se debió al alto nivel de fragmentación, quizás más fundado en cuestiones de egos que en afinidades ideológicas, ¿por qué no aprender de ese error para superarlo?

Si durante el 8N y otras marchas de 2012 la gente reclamaba a gritos que la oposición se uniera, ¿por qué no trabajar sobre el espacio de afinidades que justificara hacerlo?

Como suele ocurrir, retrospectivamente todo eso parece obvio. El mérito de UNEN fue su disposición y firmeza para avanzar realizando aquellas posibilidades.

Si hoy UNEN se suma como fuerza competitiva se entiende que represente una amenaza para las ya establecidas.

En principio, Daniel Scioli podría ser el más afectado, dado que UNEN ya le pisa los talones en intención de voto y, por ende, amenaza dejarlo afuera de un eventual ballotage. El gobernador sufre así un nuevo jaque que suma al de Sergio Massa y al de un oficialismo que nunca termina de aceptarlo plenamente.

Para Sergio Massa la irrupción de UNEN tampoco parece inofensiva. En primer lugar, el frente irrumpe como una auténtica alternativa no peronista. Al respecto, es probable que en las legislativas de 2013 el tigrense haya acaparado un voto útil no peronista que lo abrazó en ausencia de una opción con chances reales. Si UNEN se consolidara en ese posicionamiento, aquellos votos podrían entonces volver a su genuino origen.

Por último, aunque los escarceos de una posible alianza UNEN-PRO disimulen el hecho, lo cierto es que la exitosa irrupción del frente con vuelo propio, también representa una amenaza para Mauricio Macri. En primer lugar, UNEN ya lo ha desplazado del cómodo tercer lugar que detentaba hasta ahora. Pero además, a futuro podría determinar que parte del electorado macrista no peronista terminara migrando a un espacio que lo represente mejor. Entonces UNEN ya no debería afrontar el dilema de una alianza ideológicamente impura con el jefe de Gobierno, en la medida en que la demanda electoral ciudadana ya la habría tornado innecesaria.

Aunque queda un largo camino para transitar, el debut en sociedad de UNEN resulta auspicioso y, de alguna manera, enriquece el debate en torno a la sucesión presidencial. Por supuesto, para consolidar un rol competitivo deberá, por un lado, afrontar sus propios problemas internos y, por otro, convencer a una sociedad incrédula de que existe vida más allá del peronismo. Lo cual no es poco.

*Director de González Valladares Consultores.