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La peor pesadilla hecha realidad

Las cantidades de dinero y de entidades salpicadas pueden multiplicarse a la misma velocidad con la que canta cada nuevo arrepentido que pretende evitar dormir tras las rejas

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La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner. | Noticias Argentinas

Techint. Roggio. Electroingeniería. El primo presidencial. Un ex presidente de la Cámara Argentina de la Construcción. Un ex presidente de la Unión Industrial Argentina. Un ex juez federal. Un ex jefe de Gabinete. La plana mayor del ministerio más poderoso de una era. Y lo que viene.

Hubieran tomado por loco a cualquiera que apenas un mes atrás hubiera planteado que lo más granado del poder económico, político y judicial iba a tener que explicar cómo, cuándo, dónde y por qué traficaron decenas y decenas de millones de dólares irregulares. En la Argentina esas cosas no pasan.

Pero los cuadernos de un chofer y el trabajo sigiloso de la Justicia hicieron posible armar un rompecabezas que no solo se va completando, sino que además se consolida y agiganta de la mano de “arrepentimientos que amplían pruebas, crean nuevas y aportan nombres que no estaban.

Más allá de la atención que obviamente recibe la indagatoria de este lunes 13 a Cristina Fernández de Kirchner, no habría que esperar demasiado de ella. Como ya ha hecho en otras causas, negará todo. Se comprende que, por conveniencia u odio, para muchos (incluidos algunos medios de comunicación, sectores políticos y judiciales) todo empieza y termina en la ex presidenta y actual senadora.

Sin embargo este escándalo atraviesa horizontalmente al kirchnerismo, al peronismo, al macrismo y a casi todos los ismos que se les ocurra, porque desnuda con pruebas y confesiones lo que venimos contando desde que salió el primer número de PERFIL: los enjuagues delictivos entre lo público y lo privado por negocios millonarios. Sobreseimientos exprés, expedientes dormidos, investigaciones planchadas y apelaciones olvidadas le dieron diferentes paraguas legales a la impunidad.

Hay más videos. Habría escuchas. Habrá más allanamientos y detenciones

El Cuadernogate otorga la oportunidad, acaso la última, de parar con este sistema putrefacto del vínculo público-privado. Y no solamente con lo que se sabe hasta ahora. Porque habrá más. Mucho más.
Aparecerán más videos de los que se conocen hasta ahora, con reuniones y entregas de dinero. Ciertas fuentes señalan que habría incriminadoras escuchas telefónicas por pedido judicial de varios de los involucrados. Vendrán nuevos allanamientos y detenciones, tanto de ex funcionarios como de representantes de la actividad privada.

Sobre los primeros, vale hacerse una pregunta que no es caprichosa. Si tuvo que dar explicaciones Abal Medina, ¿qué pasa con el resto de los jefes de Gabinete que tuvo el kirchnerismo? Repaso la lista para algún desmemoriado: Alberto Fernández, Sergio Massa, Aníbal Fernández, Jorge Capitanich. Si, como aseguraron la mayoría de los detenidos, la plata era para la campaña electoral, ¿ninguno de estos funcionarios supo nunca nada? Otro interrogante: ¿ese sistema de recaudación por fuera de lo que permite la ley no lo continuó Cambiemos? Atentos con los aportes truchos.

Sobre los privados, se sugiere atención sobre los próximos pasos de la investigación en un aspecto clave: la ruta del dinero. Al menos tres bancos, otras tantas financieras y una cantidad similar de casas de cambio están en la mira. Las cantidades de dinero y de entidades salpicadas pueden multiplicarse a la misma velocidad con la que canta cada nuevo arrepentido que pretende evitar dormir tras las rejas. Y la pesadilla, para todos ellos, parece no tener fin. Por suerte.