COLUMNISTAS
dolar y encuestas

Missing Macri vs. Cristina iraní

20190623_disclaimer_captura_g.jpg
Aclaración. Esta semana Emmanuel Alvarez Agis incluyó este mensaje en su gira por Estados Unidos. | captura

Ahora que Miguel Pichetto convenció al titular de la Reserva Federal, Jerome Powell, de incluir las palabras “accommodative policy” en su último comunicado para dar a entender que puede bajar las tasas de interés y debilitó así la moneda estadounidense en el mundo, el Gobierno ve mejorar los indicadores de su respirador artificial e incluso se entusiasma con estar saliendo del coma electoral. La receta es simple: que el dólar baje y que hablen “ellos”.

Esta semana fue, de hecho, redonda en ese sentido para la Casa Rosada.

El tipo de cambio quedó en el inverosímil borde de los $ 44 justo un día antes del tan temido 22-J del cierre de listas que llegó más licuado que los salarios. Pichetto-Powell, la venta del campo, la habilitada participación del Banco Central en una eventual corrida y la sostenida rifa de los US$ 60 millones del FMI vía el Tesoro, le restituyeron el apodo de Facha al presidente del la autoridad monetaria,  Guido Sandleris, que hasta suelta ahora con empresarios que si siguen, en 2020 el problema será la apreciación del peso por la entrada de capitales. Lo mismo decía, por ejemplo, Gustavo Lopetegui en 2016.

Esto no le gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

El combo Isonomía-Agis que agitaron inversores en abril como cuco del mercado se repitió esta semana pero de manera inversa.

El viernes  circuló por whatsapp de un “update” en inglés de la encuesta de la consultora Isonomía que había dado nueve puntos de ventaja, por entonces en favor de la oposición, pero ahora con una mejora de diez puntos en la imagen del Presidente, y un recorte del triunfo del hoy Frente de Todos a solo dos puntos de distancia.

Y además, estuvo de nuevo esta semana el ex viceministro de Axel Kicillof, Emmanuel Alvarez Agis, en Estados Unidos viendo clientes de su consultora PxQ, pero los brokers quizás ahora no lo vieron como un drama por el “disclaimer” que añadió al final de sus presentaciones: “We do not speak on behalf of Alberto Fernández, Cristina Kirchner or any other candidate or political party”, una forma de pedir que no tomaran sus dichos como anticipo de una administración albertista desde el 10 de diciembre.

Aunque tal vez fue una lectura errada. Algunos históricos conocedores de Alberto y Cristina lo ven a Agis como “el” hombre de la economía que viene si gana la oposición, por lo que los mercados podrían haber incorporado al cóctel de las explicaciones de la pax financiera su declaración del martes en El Cronista, de que “para bajar la inflación hay que congelar la distribución del ingreso por un año”. “Es lo que tenés que decir para ser ministro y que no vuelen los mercados cuando se acerque la transición”, interpretaron. Aunque él asegura que seguirá en la actividad privada, lo ven en tándem con Matías Kulfas en el Banco Central y también apuestan que Mercedes Marcó del Pont tendría un lugar relevante en ese eventual gabinete.

El dólar estable y los primeros impactos de los planes heredados del kirchnerismo como el Ahora 12 o los créditos de la Anses entusiasmaron a los cerebros electorales PRO. Creen que así les rendirá frutos, como siempre, la cada vez más repetida aparición pública de la ex presidenta Cristina Kirchner. Con su acto en Rosario ratificó que su tono se está alejando del debut light como escritora en la Feria del Libro de Buenos Aires, y vuelve a su versión más pre 2015, aunque con un componente extra: la creciente onda iraní de integrar verdad política con verdad religiosa. En su cuenta de Twitter cita al papa Francisco como referencia de autoridad cuando éste habla del Poder Judicial o los medios. Y el otro día insistió con esa jerarquización extraña de viudez sobre divorcio que dicha por cualquier otra persona hubiera sido trending topic por lo retrógrada.

Con las figuras del tren fantasma más visibles, Macri se pierde en la grieta y es capaz hacer papelones por encima del promedio. Por más horrible que fuera (ahora) Moyano, la imagen de un Presidente gritando contra un sindicalista adelante de pibes de un colegio fue el mood más De la Rúa saliendo de ShowMatch que se le ha visto al jefe de Estado en toda su gestión. Con todo, esta estrategia electoral es-lo-que-hay de Macri 2019 se completa con la evolución de Cambiemos a Juntos por el Cambio, que cada vez se parece más a un Rejunte por el Cambio con tal de arañar cualquier punto que lo arrime lo más posible a la reelección.