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Un faltante

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Se sube un paranoico a un taxi. El taxista le pregunta ¿Adónde vamos? El paranoico le contesta: Sabés muy bien adónde vamos. Generalmente soy yo el paranoico. Pero ahora noto que está creciendo mucho la paranoia ajena. Y con toda razón. El prototipo de taxista paranoico está que no puede más, se sale de sí mismo, su cabeza alcanzó el punto de ebullición, escucha la info de la radio y elucubra conspiraciones faraónicas, imagina planes subterráneos, grandes maquinaciones que trabajan día y noche allá al fondo de su cerebro mientras él trata de dormir. Y las rebota con los pasajeros, las intercambia, las pone a prueba para ver si los otros notaron lo mismo, las amasa con cada interlocutor y les va adhiriendo contenido, hasta que el tipo que se sube al final del turno recibe la enorme bola de nieve que viene rodando todo el día con el envión del taxi.

Fariña no es que se equivocó cuando dijo que un millón de dólares pesa un kilo cien, lo que pasa que lo imprimen en Ciccone y es otra tinta, otro papel. ¿Me entendés lo que te digo? Todo eso se lava en Panamá. Boudou imprime euros, dólares, los Evita también. Los Evita al final no se distribuyeron porque se dieron cuenta que valen más. Los encanutaron para venderlos de colección en el extranjero. Eso también lo sacan en aviones. ¿Me entendés lo que te digo? Y lo que no logran sacar está abajo de la tumba de Néstor, que es como Tutankamón, está enterrado con todos los tesoros. Abajo del mausoleo hay una bóveda gigante. Es una cantidad de guita que no nos podemos ni empezar a imaginar. El pendejo ese hablaba de un faltante. Que lo corrieron por un faltante dijo. Imaginate: si los autos de ese pibe, la merca, los gatos, el casamiento, los vuelos en jet privado, los departamentos en Puerto Madero, todo eso se lo compró con un faltante, lo que será la guita gruesa. ¡Ese es el cambio chico! ¿Me entendés lo que te digo?
Así, más o menos, era su discurso. Entraba y salía de la lógica. Por momentos parecía todo posible, por momentos había que rebobinar para buscar el salto cuántico, el cambio a la dimensión desconocida. ¿Me entendés lo que te digo?

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