Como cada año, el Tribunal Superior de Justicia celebra un acuerdo para designar al próximo presidente o presidenta del cuerpo, además de las autoridades de cada una de las Salas que lo integran y del Consejo de la Magistratura de la Provincia.
Pasado mañana podría ser el día en que los siete vocales acuerden la continuidad de Aída Tarditti, teniendo en cuenta la extensa tradición de presidencias bienales.
Para el martes 19 de diciembre fue convocado el acuerdo, pero podría también postergarse la decisión una semana más. Fuentes consultadas por PERFIL Córdoba dejaron abierta la posibilidad de cambios en la cabeza del cuerpo. No está nada cerrado.
Cabe la posibilidad de un nuevo año en la coordinación y representación del TSJ para Tarditti, una mujer de aquilatada trayectoria y sólido sustento jurídico; como también un cambio.
Hasta aquí, la tradición indica que este tipo de decisiones fueron siempre adoptadas por unanimidad y el criterio que continúa preservándose es la renovación periódica para evitar que cualquiera de los vocales del cuerpo se perpetúe en el poder.
De los siete miembros del Tribunal Superior, solo dos no ejercieron aún la presidencia. María Marta Cáceres de Bollati que llegó al TSJ en 2014 y Sebastián López Peña, quien asumió como vocal al año siguiente.
