El diputado salteño, precandidato a Presidente, pasó por Córdoba y aseguró que en esta provincia cuenta con el apoyo del campo, militares, católicos y evangélicos.
EN EL ORFEO. Olmedo siguió el show de Luis Miguel muy cerca de Urtubey y camaristas federales. |
CEDOC PERFIL
—¿Qué lo trae por Córdoba?
—Vengo a reafirmar mi candidatura a Presidente, a reunirme con gente que sigue de cerca mi proyecto y busca soluciones a todos los problemas que estamos padeciendo.
—De paso, lo fue a ver a Luis Miguel…
—Sí, me invitaron y fui. Lindo show.
—¿Con quién vino?
—Solo. En mi camioneta. Yo no necesito a nadie más para recorrer el país, ni equipos, ni custodios. Si uno quiere, lo puede hacer, aunque sea solo.
—¿Va a tener candidato a gobernador en Córdoba?
—No.
—¿Por qué?
—Porque es poco serio armar una candidatura en 30 días. Eso hacen otros partidos, nosotros no.
—Como observador político, ¿cómo ve la feroz interna de Cambiemos en Córdoba?
—¿Feroz? ¿Quién dice que es feroz? No tengo por qué meterme en lo que pasa en Córdoba pero en la política argentina siempre pasa lo mismo, parece que todos se dividen y al final no pasa nada, terminan todos juntos.
—¿A qué aspira?
—A ser Presidente. En Salta estoy primero.
—Suena difícil. Muchos dicen que esto es un trampolín para otro cargo.
—No, yo trabajo en la Cámara de Diputados y soy de los que más proyectos presentó. Y muchos de esos proyectos el gobierno los aprobó mediante DNU… La gente quiere cambiar.
—¿Qué expectativas tiene para Córdoba?
—Muy buena s. Acá, la gran mayoría votó a Macri. Y hoy muchos de ellos están desencantados. Fíjese quién votó a Macri: la gente del campo, y yo soy del campo; los militares, yo dije que iba a restaurar el servicio militar obligatorio, y los cristianos, evangélicos y católicos. Recibo un apoyo muy importante de evangélicos. Me apoya mucha más gente de la que se cree. Me apoyan desde distintos estratos sociales.
—¿Cree que lo subestiman?
—Clarín dijo “el marginal Olmedo” en una nota y al principio me enojé. Después me di cuenta de que tenían razón. Soy un marginal, porque estoy fuera del sistema. Los políticos tradicionales y el gobierno me quisieron tapar, pero no pudieron, hay encuestas en las que aparezco tercero. A Bolsonaro (Jair, presidente de Brasil), no lo tomaban en cuenta al principio. Mire los resultados.
