Niegan extradición a Marruecos de un cordobés por tráfico de drogas
Si el país africano da conformidad será juzgado en Argentina. Sería el primer caso de un juicio realizado con prueba producida en otro Estado.
HACHIS. Se trata de un alucinógeno que se obtiene de la mezcla de hojas y flores secas del cáñamo índico. Se encontraron 7.425 kilogramos. |
Cedoc Perfil
La posibilidad de que un argentino nativo sea juzgado aquí por hechos cometidos en el extranjero, y con prueba producida en otro país, constituye un hecho inédito. Es factible que esto ocurra a la luz de la resolución adoptada por el juez federal, Alejandro Sánchez Freytes, quien el lunes último rechazó la extradición solicitada por Marruecos de Eduardo Bolzón, un cordobés de 62 años. En el mismo fallo decidió que debe ser juzgado en Córdoba y le dio un plazo de 30 días al país africano para que renuncie a su jurisdicción y envíe las pruebas y testimonios reunidos en la investigación. A esto se suman otros 30 días para que el trámite se efectúe a través de la Cancillería.
En caso de que el reino de Marruecos dé su conformidad, el caso será primero instruido por un juzgado federal que incorporará los antecedentes obtenidos por la justicia marroquí y luego un tribunal oral juzgará a Bolzón y establecerá, eventualmente, la pena correspondiente. La decisión de Sánchez Freytes solo puede ser apelada ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Si, por el contrario, el estado africano no consiente que el juicio se haga en nuestro país, Bolzón debería ser liberado y el caso podría quedar impune, contaron fuentes judiciales consultadas por este diario.
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Delitos. Bolzón fue detenido en el aeropuerto Taravella en enero de este año. Pesaba sobre él una orden de captura de Interpol. Está acusado por la justicia de Marruecos de los delitos de tenencia ilegal de estupefacientes, complicidad en su transporte y comercialización, tentativa de exportación sin autorización o declaración y complicidad.
Si bien nació en Córdoba tiene, además de la ciudadanía argentina, la italiana, por ser hijo de padres nacidos en el país europeo. Apenas fue apresado, llegó desde Marruecos el pedido de extradición firmado por el fiscal del Rey, Abdallah Ahmanna, y comenzó el proceso para evaluar si procedía concederla o rechazarla. Aspectos analizados.
Entre el Reino de Marruecos y la República Argentina no hay tratado de extradición. Por esa razón, se analizó el caso a la luz de la Convención de las Naciones Unidas contra el Tráfico Ilícito de Estupefacientes del año 1.988.
Otro aspecto que se consideró fue la gravedad del delito que se le endilga a Bolzón que lo haría posible de una condena a cárcel efectiva. La defensa, ejercida por Mercedes Crespi, sostuvo que “existen motivos fundados para suponer que de concederse la entrega, el requerido será sometido a tortura y otros tratos o penas crueles e inhumanas o degradantes”, constatados en diversos informes de organismos internacionales de derechos humanos que dan cuenta de situaciones en donde se habrían vulnerado derechos o violentado la integridad física de personas en cárceles marroquíes. Por informes solicitados y recibidos desde aquel país, el juez consideró que la situación había mejorado ostensiblemente y descartó este aspecto como condicionante de la eventual extradición. Sostuvo, además, que fueron los órganos jurisdiccionales competentes quienes requirieron el traslado del detenido a aquel país.
Por qué la negó. La ley argentina 24.767 de cooperación internacional en materia penal establece la opción para los ciudadanos de nuestro país que sean requeridos por otro Estado, de ser juzgados por la justicia local. A esta norma se ajustó el juez Sánchez Freytes para rechazar el pedido de Marruecos ya que, apenas inició el proceso, Bolzón expresó que optaba por la posibilidad de ser juzgado acá. Argumentó su temor a ser víctima de tortura y maltrato en las cárceles de Marruecos. Por ser argentino nativo el magistrado consideró que la opción prevista en la ley era válida en su caso. Mientras dure el trámite internacional, Eduardo Bolzón continuará detenido en la cárcel de Bouwer.
MAS DE 7 MIL KILOS DE HACHÍS EN BOLSAS CON FIBRA DE COCO
La imputación sobre Eduardo Bolzón nace de un operativo realizado por la gendarmería marroquí en el puesto de Guerguerat, en el Sahara Occidental, en el límite con Mauritania. Fue el 11 de marzo del año pasado.
En un control a dos camiones que se dirigían a Senegal, la fuerza de seguridad revisó bolsas de plástico con fibra de coco que formaban la carga. Encontraron 7.425 kilogramos de hachís ocultos.
La mercadería había sido cargada en Sidi Bibi, una pequeña localidad rural con poco más de 20 mil habitantes. En Agadir se realizaron los trámites para exportar la carga y el titular de la sociedad denominada “Horto Frutícola” era precisamente Bolzón.
Con las pruebas y testimonios reunidos lo imputaron por tenencia ilegal de estupefacientes, complicidad en su transporte y comercialización, tentativa de exportación sin autorización o declaración y complicidad.
