Polémica por ‘aumentos desmedidos’ en cuotas de la Universidad Siglo 21

La semana que pasó tuvo lugar un reclamo hacia la Universidad Siglo 21 que llamó la atención en redes sociales. #ChauSiglo21 se impuso como tendencia nacional durante más de un día.

El martes un grupo de alumnos de la institución privada con sede en Córdoba pero alcance nacional, dio cuenta de lo que consideran aumentos excesivos de las cuotas que pagan en la entidad presidida por Juan Carlos Rabbat.

Así, se sucedieron testimonios que señalaban un segundo aumento en un año crítico para la mayoría en Argentina, al señalar incrementos que oscilan entre el 40% y el 90%, dependiendo de la carrera.

Los aumentos. Al respecto, una alumna de la carrera de administración mostró cómo se dio el incremento. Al comparar la matrícula de julio de 2018 con la de julio de 2019, el aumento llega al 75%. Al considerar un bimestre del año pasado contra uno de este año, el incremento llega al 110%. Dos cifras muy por encima de la inflación interanual, precisamente el justificativo –hasta ahora– de los nuevos valores de las cuotas de Siglo 21. Y así, este tipo de relatos se repitieron y se repiten.

Contactado por PERFIL CORDOBA, otro de los alumnos -en este caso de Relaciones Internacionales-, dio cuenta de su panorama: “Los estudiantes de la Siglo sufrimos a principio de año un aumento de los aranceles, en ese momento justificado por la inflación. Y ahora, a mitad de año, volvimos a sufrir otro para el segundo semestre”, precisa y agrega: “Dependiendo del caso y de las carreras, oscilan entre un 40% y un 90% en algunos casos. Yo pasé de 40 mil a 60 mil pesos. Son cifras muy superiores a la inflación y la universidad no explica los criterios de los aumentos”. “Hace varias semanas que viene la queja y el pasado martes un grupo organizó una movida en Twitter que dio lugar al hashtag #ChauSiglo21, donde se mostraron capturas de pantalla que dan cuenta de los aumentos y también cuestiones referidas a la calidad académica de la institución que salen a la luz vinculadas, obviamente”, precisa la misma fuente y agrega: “El martes fue tendencia nacional y también parte del miércoles y hasta ahora -por el viernes- la universidad no dio una respuesta oficial. Lo más cercano fue que el presidente y fundador, Rabbat, le respondió a una etiqueta de un alumno en Twitter donde dijo que los aumentos están justificados por la inflación”.

Al respecto, el propio Juan Carlos Rabbat, a través de su cuenta de Twitter @presidenteUES21 a un alumno que lo increpó le respondió: “Tu derecho de queja no te da derecho ni a la injuria ni al agravio. Te invito a que te rectifiques públicamente, sino deberás hacerlo ante la justicia. Información: Los aranceles de la Siglo siguen la inflación y cada semestre es previsible, pues no se modifican hasta terminarlo”.

Este medio se contactó con el rectorado y con la agencia de comunicación que maneja la cuenta de la Universidad, y al cierre de esta edición no obtuvo respuesta al pedido de información y entrevista solicitados.

Otras comunicaciones. No esla primera vez que alumnos de la universidad se quejan por el aumento de los aranceles, pero sí es inédita la movida alrededor y el impacto que tuvo en redes, más allá de la poca cobertura mediática del tema. Sin dudas es motivo de preocupación.Al respecto, dos comunicaciones internas de la Universidad, que hicieron públicas también a través de redes sociales, dan cuenta de esta inquietud.

La primera es dirigida a los docentes y desde la secretaría de Gestión y Evaluación Académica les solicitan que debe darse en clases una discusión sobre el aumento de los aranceles y la deriven a los canales correspondientes. La segunda fue enviada a los alumnos el jueves por la noche donde reconocen la crisis: “Todos sabemos que estamos transitando una coyuntura económica compleja con impacto negativo en la vida personal y de las organizaciones de nuestro país en su conjunto”, arranca la carta, y explicita que se está “trabajando para generar alternativas que nos permitan asegurar la excelencia de la calidad educativa que nos distingue”. Y en ese sentido, comunican que extienden el pago de la promoción de descuentos sobre los aranceles hasta el próximo 11 de julio.

Contexto.Las universidades privadas, a diferencia de los colegios primarios y secundarios de gestión privada, no reciben aportes estatales por lo cual tienen autonomía para fijar las cuotas. Sin embargo, no son empresas, ya que se conforman como fundaciones o asociaciones civiles, de acuerdo a lo que dicta la Ley de Educación Superior. Responden al Consejo de Rectores de Universidades Privadas (Crup) y a la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (Coneau).

Un referente especializado en educación superior (que prefirió el off the record porque trabaja en una dependencia pública que se ocupa de los asuntos vinculados a las políticas universitarias) se refirió a la Siglo 21 como la impulsora de “un modelo polémico que apunta a la masividad, distinto al tradicional de la privada”.

“De las 55 universidades privadas que hay en la Argentina, la Siglo 21 no es la más cara, porque apunta a un segmento que necesita de la facilidad del cursado que proponen, a distancia -precisa el especialista-. Son, generalmente personas que estudian y trabajan y no pueden pagar altos aranceles. El remezón que se produjo esta semana se dio en la misma base que ellos reclutan”, analiza.

Petición en Change
Bajo el título “No al aumento desmedido de los aranceles de la Universidad Siglo 21” la petición juntó 1812 hasta el sábado. Un número interesante si se compara con la cantidad de alumnos, 61 mil en todo el país. Está dirigida al ya mencionado Rabbat, a la rectora, María Belén Mendé, y a Rodolfo Terragno, presidente del Consejo Académico.