Un cóctel de emergencia de Provincia, Municipalidad y Nación para aumentar la recaudación impositiva

No hay analista económico, asesor financiero o gurú de la macro que se resista a lanzar la advertencia de que el primer trimestre de 2019 será muy duro en términos de actividad económica. Para quienes están parados del lado del mostrador del Estado esto se traduce en una esperable batalla para sostener la recaudación y la captación de tributos, que se libra en los tres niveles de administración pública, Nación, Provincia y Municipalidad y que mostró algunas novedades las últimas semanas. En concreto, las distintas gestiones públicas metieron mano en una serie de estrategias para asegurar la cobrabilidad de los tributos. Medidas que van desde descuentos y beneficios para los cumplidores, operativos que se extenderán durante el verano, notificaciones sobre la obligatoriedad de adelantar tributos o gestiones cruzadas entre distintas dependencias estatales para aumentar la eficiencia en la cobranza.

Para los funcionarios, este cóctel de medidas tiene por objetivo de corto plazo sostener la recaudación en un complicado contexto de caída de actividad. Para el mediano y largo plazo hablan de acciones que ayuden a aumentar el universo de contribuyentes, que repercutirán en un horizonte de reducción de presión fiscal. Para los contribuyentes, comerciantes y empresarios pyme algunas acciones solo se explican por la falta de tacto ante la complicada situación que atraviesan.

La caída. La inflación de 2018 que se estima en torno al 46% dejará secuelas en las cuentas públicas. Afip, por ejemplo, comunicó que en noviembre la recaudación alcanzó los $300.119 millones. Se trata de un incremento del 33,7%, unos 15 puntos por debajo de la inflación interanual. En el Palacio 6 de Julio, desde la Secretaría de Economía y Finanzas confían que el crecimiento interanual de la recaudación propia ejecutada acumulada al cierre del mes de septiembre fue del 32,50%. Esperan que, para el cierre del año, el crecimiento esté aproximadamente 7,5 puntos porcentuales por encima de esa ejecución. Esto significará una retracción real de la recaudación propia de seis puntos de acuerdo a la inflación esperada. En la Provincia el panorama es similar. Noviembre dejó ingresos por $14.477 millones, un crecimiento nominal del 33,9% respecto al mismo mes del año 2017 y una caída real interanual de 9%. “La caída en términos reales seguramente será mayor en la recaudación de origen provincial debido a que la Provincia cumple estrictamente, tanto en la letra como en el espíritu, la baja de impuestos prevista en el Consenso Fiscal”, apuntan desde Finanzas provincial.

Previsión 2019. En relación con el temido primer trimestre del año que viene, desde la Municipalidad señalaron que “se prevé una contracción de la actividad económica y se estima una reactivación paulatina que traccionará al cumplimiento de las obligaciones y a la recomposición de la recaudación en los meses posteriores”. En tanto, en la Provincia creen que es previsible que la recaudación siga mostrando variaciones nominales inferiores al crecimiento de los precios. “Hay que tener en cuenta que estaremos comparando una situación que seguramente seguirá siendo recesiva con los niveles de actividad relativamente altos del primer semestre del 2018. A eso hay que agregar que el cumplimiento del Consenso Fiscal implicará para 2019 una pérdida adicional del 10% de la recaudación de ingresos brutos”, sostienen.

Las acciones. En la Provincia, la Secretaría de Ingresos Públicos que comanda Heber Farfán ya anticipó que la Policía Fiscal quedará exceptuada del receso que tendrá toda la administración pública durante enero. Incluso se la excluirá de la declaración de días inhábiles durante dicho período. En la práctica esto implica no solo que se verán operativos durante el verano, sino que todos los plazos contemplados por las actuaciones que realice la Policía Fiscal se contarán normalmente. Más allá de estos meses, la apuesta en Provincia pasa por la digitalización y mayor fiscalización: “Diseñamos un modelo de fiscalización simplificado que facilita la rectificación de un eventual desvío de la situación fiscal de una empresa, evitando que incurra en costos innecesarios por demoras o por falta de información oportuna. Por otro lado, estamos digitalizando todo el proceso de fiscalización, expandiendo el uso del Domicilio Fiscal Electrónico y de las notificaciones electrónicas”, subraya el ministro de Finanzas Osvaldo Giordano.

Para el funcionario provincial los logros alcanzados con la digitalización de los impuestos patrimoniales o con el Monotributo Unificado Córdoba (MUC) son “muy contundentes”. Señala, además, que el padrón de monotributistas aumentó casi un 40% luego de la integración. Por su parte, en la Municipalidad se fijó un incremento del 36% en los impuestos, una suba que podrá aplacarse en caso de que se trate de contribuyentes cumplidores, o de que se pague en menos cuotas o por medios electrónicos.

Con el objetivo de sostener la recaudación y ampliar la cantidad de contribuyentes, la secretaría que conduce Hugo Romero también hará operativos múltiples con cuerpos de inspectores y mantendrá la obligación de que se adelante el pago de la tasa de Comercio e Industria, algo que cayó mal entre las pymes (Ver “Quejas entre empresarios…”). “En 2019 finalizará la implementación del Sistema de Administración Municipal Tributario. Adicionalmente, pondremos a disposición de los vecinos nuevas formas de pago por medios electrónicos que facilitarán y agilizarán el pago de las contribuciones municipales. El intercambio de información con otros organismos es la principal fuente que nos permite accionar sobre los evasores. Al igual que los agentes de información, retención y percepción”, señaló Romero.

Cayó la creación de empresas Además de que se constató un aumento en la cantidad de firmas que entraron en cesación de pagos e iniciaron concursos preventivos, hay otro dato alarmante: cayó la creación de empresas. Desde Finanzas de la Provincia informaron que se observa una caída del 16% en los primeros 10 meses del año respecto de igual periodo de 2017 en este sentido. Algo similar se constata al analizar la baja de empresas inscriptas en Ingresos Brutos, que ronda el 18%.