El filósofo argentino lo obtuvo con “El sueño de los mártires”. Según el jurado, “una fidedigna y brillante anatomía de las motivaciones actuales del yihadismo”.
Ganador. Scavino reside en Francia desde 1993. Algunos de sus títulos, muchos de ellos editados por Eterna Cadencia. |
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El filósofo y escritor argentino Dardo Scavino (Ciudad Jardín Lomas del Palomar, provincia de Buenos Aires, 1964) ganó el 46° Premio Anagrama de Ensayo por su obra El sueño de los mártires. Meditaciones sobre una guerra actual. Una “fidedigna y brillante anatomía de las motivaciones del yihadismo” y una “impugnación de la falsa inocencia de Occidente”, según señaló el fallo del jurado que reconoció el trabajo con una dote de 8 mil euros (9.400 dólares). El ensayo de Scavino, radicado en Francia desde 1993, se impuso sobre 99 originales presentados, provenientes de 13 países, y entre los seis finalistas tras las consideraciones de un jurado compuesto por el ensayista Jordi Gracia, Chus Martínez (directora del Instituto de Arte de la Academy of Art and Design de Basilea), la traductora Joan Riambau Möller, Daniel Rico y la editora Silvia Sesé, la descubridora del escritor sueco Stieg Lar-sson cuando estaba a cargo del sello Destino del Grupo Editorial Planeta.
El origen de El sueño de los mártires se remonta al día siguiente de los atentados del 11 de marzo de 2004 en la estación Atocha de Madrid, después de que Scavino asistió a la reacción de un grupo de sus estudiantes musulmanes –se desempeña como profesor de la Université de Pau et des Pays de l’Adour en el departamento de Pirineos Atlánticos (sur de Francia)– que despertaron sus reflexiones. Luego publicó un artículo en 2015 sobre el atentado al semanario Charlie Hebdo y se decidió a escribir el libro. En éste, Scavino plantea que el mundo se encuentra bajo la primera guerra global, la cual ya no es interestatal y se realiza en cualquier zona del planeta. En ella se enfrentan drones (producto de la estrategia estadounidense de reducir al mínimo las bajas propias) contra mártires, cuyo “sueño” de implantar un califato transnacional –en muchos casos, los reclutados desconocían los principios fundamentales del islam– explica para el autor que la guerra en curso no consiste en un antagonismo entre culturas o religiones (como sostiene Samuel Huntington en El choque de civilizaciones), sino responde a razones políticas.
En su meditación, Scavino incluye los atentados de Barcelona de agosto de 2017 y analiza el papel de las redes sociales utilizadas para incorporar a nuevos reclutas, el “limbo legal” en que se hallan los prisioneros (a quienes no se aplica, recluidos en cárceles clandestinas, la Convención de Ginebra ni la legislación criminal estadounidense), cómo los movimientos de liberación árabes (antiimperialistas y laicos) dieron lugar al islamismo, el origen del concepto de martirio, el hecho paradójico de que gran parte de los aspirantes a mártires proceden de Occidente y han sido educados de modo laico. Para Scavino, es un problema esencialmente político que se apropia de textos religiosos islámicos, así como en Occidente también se emplean términos similares, como Eje del Mal y otros.
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Scavino estudió Filosofía y Letras en la UBA. Ha sido profesor en ella y en las de Burdeos y Versailles Saint-Quentin-en-Yvelines (París). Entre sus varios libros destacan Nomadología. Una lectura de Deleuze, La filosofía actual. Pensar sin certezas, y Las fuentes de la juventud. Genealogía de una devoción moderna.
