A contramano: así parece ir Diego Maradona de cara a su primer partido oficial como técnico de la Selección. Mientras los equipos más exitosos del fútbol mundial demuestran la importancia de contar con buenos marcadores de punta, el Diez tendría decidido ya no usar ese tipo de jugadores el sábado ante Venezuela por las eliminatorias para el Mundial, sino disponer una defensa con un líbero y dos stoppers.
Así lo viene dejando entrever el propio Maradona en los entrenamientos que realiza con el Seleccionado en Ezeiza, donde viene parando un equipo con un esquema "3-4-3" que, según el diario especializado Olé, ya "está definido" como el que Argentina usará en el Monumental ante los venezolanos.
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De esta manera, el otrora mejor jugador del planeta abandonará el sistema que tan buenos réditos le dio en los amistosos que en Europa el representativo nacional le ganó a Escocia y Francia, en los que la presencia y el desempeño de dos marcadores de punta clásicos (Javier Zanetti y Emiliano Papa) pareció contribuir bastante a la notoria mejoría evidenciada en esos dos primeros ensayos de la "Era Maradona" respecto del ciclo anterior.
Para colmo, esta vez el DT improvisaría en la función de líbero a Marcos Angeleri, quien justamente viene destacándose en Estudiantes de La Plata como marcador o volante lateral desde hace varios años. Como stoppers, en tanto, jugarían el boquense Juan Forlín, el ex xeneize Daniel Cata Díaz o Zanetti por un lado, y Gabriel Heinze por el otro.
De contar con dos laterales clásicos, en definitiva, el equipo pasaría a no tener ninguno, lo que no sólo le restaría eficacia a la hora de defender sino también al momento de sorprender en ataque por las puntas. Y es que no es lo mismo que esas tareas las hagan defensores capaces de lanzarse en velocidad a que las cumplan volantes como Maxi Rodríguez o Jonás Gutiérrez, al parecer los elegidos para sobrellevar este sábado esa doble responsabilidad a lo largo de una y otra banda.
Esto, al menos, es lo que parece comprobar cada vez más la presencia indiscutida de marcadores laterales con quite y desborde en equipos como el Manchester United, el Inter de Milan y las selecciones de Brasil o Alemania, según refleja hoy en la edición online del diario inglés The Guardian una excelente columna del periodista especializado Jonathan Wilson.
"¿Por qué es la de marcador de punta la más importante posición en el campo?", advierte ya desde su título el artículo en cuestión, que expone un dato para nada irrelevante como lo es que las últimas cuatro ediciones del Mundial han sido ganadas por el equipo con el mejor par de laterales: Jorginho y Branco (Brasil) en 1994; Lilian Thuram y Bixente Lizarazu (Francia) en 1998; Cafú y Roberto Carlos (otra vez Brasil) en 2002 y Gianluca Zambrotta y Fabio Grosso (Italia) en 2006.
Figuras de la actualidad como Sergio Ramos, Philipp Lahm, Alexander Anyukov, Patrice Evra, Dani Alves y Ashley Cole son otros de los muchos ejemplos puestos en la nota para demostrar la terrible importancia que desde hace tiempo -y cada vez más- tiene en cualquier competencia futbolística contar con este tipo de jugadores, cuya presencia nadie discute en sus equipos sino que por el contrario es muy respetada y potenciada por los entrenadores.
Lejos de afirmar candidatos para el puesto, en cambio, Maradona parece decidido a excluirlos. Y más allá del mayor poder ofensivo que se busque con su "sacrificio" o de las condiciones que Jonás Gutiérrez y Maxi Rodríguez tengan para "carrilear" por las bandas, esto no resulta muy entendible teniendo en cuenta los propios antecedentes del equipo argentino. Aunque ir a contramano del mundo y de la propia historia sea ya toda una constante en la Argentina.
