DEPORTES
gran triunfo en la plata

Boca dio el mejor golpe

Se banco el juego brusco de gimnasia, que termino con nueve, y lo gano sobre la hora, para quedar firme en la punta. Calleri, expulsado.

EMPATE PROVISORIO. Nico Lodeiro puso el 1 a 1 y celebra con dedicatoria. Luego salió reemplazado por su compatriota Bentancur.
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Será este triunfo de Boca, logrado con el último suspiro, con las cartas jugadas, uno de esos que cotizan doble al final del torneo, de los que en la jerga futbolera se definen como “partido de campeonato”? Es muy probable, si se analiza el contexto en el que los de Arruabarraena cantaron victoria. La mano venía torcida en el juego pese a la ventaja númerica que tenían en cancha (jugaron casi media hora con un hombre más que el Lobo luego de la expulsión de Coronel), se habían quedado sin Calleri, expulsado por un codazo a Barsottini, justo cuando el equipop más lo necesitaba, Tevez no daba pie con bola (jugó su peor partido desde su regreso) y cada vez que Gimnasia le tiraba la pelota al lungo Mazzola, encendía alarmas. Boca manejaba la pelota pero el partido se jugaba al ritmo de Gimnasia, que lo anestesiaba cada vez que podía y apostaba a la heroica, lo que parece sello registrado de la eraTroglio: hacer del aguante un apostolado. Las intenciones de jugar, más en contextos como el de ayer, pasan a segundo plano.
Así se iban los minutos y a Boca se le iba la chance de escaparse a tres puntos de San Lorenzo, y obligarlo a ganar hoy para alcanzarlo. Pero tuvo la última bola en los pies de Palacios, que llegó hasta el fondo y mandó un centro rasante y envenenado (más buscapié que pase al compañero o tiro al arco), que Chávez mandó adentro para dar vuelta el partido y cerrar un negocio redondo.
Si el negocio fue redondo por el resultado, el camino de Boca durante toda la tarde fue bastante sinuoso. Salvo en los primeros minutos, en los que pareció imponer presencia por la movilidad de Pablo Pérez y algunos (muy pocos en realidad) encuentros con Tevez, todo le costó demasiado. Tuvo más llegadas con peligro que Gimnasia, es cierto; pero la mayoría fueron a base de pelota parada, que Navarro neutralizó con firmeza en el arco. Ni siquiera pudo imponer dominio tras la roja a Benítez por una salvajada contra Cubas. A Lodeiro, presunto eje de juego, le llegaba poco la pelota y cuando la tenía ralentaba los movimientos, haciendo que Boca se volviera previsible.
Algo de eso debe haber observado el Vasco, que en el comienzo del complemento mandó a la cancha a Palacios por Cubas, para perforar por el costado derecho, aunque corriera riesgos en el medio. Pero en la primera que tocó el pibe, se la robaron y de allí llegó el gol de Gimnasia. Por suerte (y con suerte) para Boca, un tiro defectuoso de Gago al arco encontró a Lodeiro en el camino y el uruguayo puso el 1-1.
 Desde allí, Boca se jugó a suerte y verdad por la victoria con vergüenza y ambición, sus mayores virtudes; Arruabarrena echó el resto al mandar a Chávez a la cancha, y el “comandante” le respondió para ganar una batalla que bien puede significarle ganar la guerra al final del torneo.