Estaba en peligro de extinción en el fútbol en general. Pero de pronto, el enganche renace y cobra valor en River. Ese jugador que piensa, hace la pausa, juega y hace jugar a sus compañeros recupera su lugar: el último campeón de Sudamericana ya tiene tres en su plantel que seguramente se convertirán en cuatro.
Pity. La llegada de Gonzalo Martínez le da más variantes de buen pie a Marcelo Gallardo, otro histórico del puesto. El mejor 10 de la historia de River, Norberto Alonso, recibe con alegría la noticia de la nueva incorporación ya que, le dice a PERFIL, es un jugador que venía observando desde hacía tiempo y por el que pedía a los dirigentes. “Tiene un juego rápido y muy técnico, se adapta muy fácilmente a la banda izquierda y tiene buen retroceso” opina el Beto.
Esto no le gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
El técnico de Huracán, Néstor Apuzzo, es consciente de lo que se le acaba de ir de las manos: “Perdemos a una de las mejores apariciones en el fútbol argentino de los últimos tiempos. Un jugador muy fresco, que en el mano a mano siempre te gana. River se va a encontrar con un jugador bárbaro, muy maduro a pesar de sus 21 años”.
Piscu. Una de las mejores incorporaciones de River en los últimos años fue la de Leonardo Pisculichi, quien estuvo peregrinando por España, Qatar, China antes de volver a su casa de La Paternal y descender con Argentinos Juniors. Gallardo apostó por él, por su recuperación, por revivirlo y el resultado fue positivo. Piscu fue uno de los artifices de la obtención de la Copa Sudamericana gracias a su juego y sobre todo a su precisión en el pie izquierdo. El gol a Boca en la semifinal, más el del empate en Medellín en la final de ida y los centros exactos a las cabezas de Gabriel Mercado y Germán Pezzella en la revancha ante Atlético Nacional lo elevaron a un altar en la consideración de los hinchas. “Tiene una excelente pegada y siempre te devuelve la pelota redonda. Lo mejor que mostró es su juego de tres cuartos de cancha para adelante: se saca un hombre de encima con facilidad y remata, como pasó en el gol a Rosario Central en la segunda fecha”, lo desmenuza Alonso.
Payaso. En los últimos entrenamientos, Pablo Aimar le está demostrando al entrenador que ya lo puede contar como un nuevo refuerzo. Su dolor en el pie izquierdo disminuyó notablemente, y ya se entrena a la par de sus compañeros. La exigente pretemporada en Punta del Este le sentó bien al Payaso y en su vestimenta en los prácticas ya luce la 10. Para el Beto, Aimar “no va a tener problemas” en recuperarse definitivamente y ser protagonista en la larga lista de campeonatos que afrontará River en 2015: el nuevo torneo local, la Libertadores, la Recopa, la Suruga Bank, la Copa Argentina y la Sudamericana.
Tomy. En principio, el que quedará un poco relegado en la competencia es Tomás Mártinez, la joven promesa, que en marzo cumplirá 20 años y arrastra buenas actuaciones con la Selección argentina en actual Sudamericano de Uruguay. Tomy tiene un buen arranque desde mitad de cancha y una gambeta corta desequilibrante. Para Alonso, este puede ser su año de despegue, “pero dependerá mucho su personalidad ya que algunos jugadores tardán más tiempo en madurar”. Así, Gallardo se encuentra con un problema que a cualquier técnico le gustaría tener en su plantel: tratar de decidir entre cuatro jugadores de buen nivel quién será el 10 de River.
