Es por los
supuestos destrozos que protagonizó la "Pulga" en un bar de Rosario. Aseguró que
el juvenil del Barcelona
no participó de la pelea y que el dueño del lugar
les pidió plata para no difundir públicamente el caso.
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Cedoc
Jorge Messi, padre de Lionel, figura del Barcelona y la Selección argentina, está convencido que la denuncia radicada contra su hijo por supuestos destrozos causados en un bar de Rosario, es parte de un complot para perjudicar a la familia. Justamente ayer un juez rosarino desestimó la presentación realizada por el dueño del establecimiento.
Messi padre desmintió tajantemente la participación de su hijo en un altercado ocurrido en un bar de Rosario días antes de regresar a Barcelona y denunció que el dueño del lugar le pidió plata a través de un tercero para no llevar el caso ante la opinión pública, informó el diario deportivo español Sport.
Según Jorge, la "Pulga" se encontraba tranquilamente acompañado de unos amigos cuando se inició el tumulto. Además, negó que el chico interviniera en la disputa y mucho menos que acabara rompiendo algún cristal o parte del mobiliario.
El padre de Messi denunció que el propietario del bar lo contactó a través de una tercera persona y le pidió 18.000 dólares para no difundir lo ocurrido en su local, oferta que rechazó tajantemente.
Mientras tanto, el juez Correccional Nº6 de los Tribunales de Rosario, Adolfo Claverie, no dio curso a la presentación legal efectuada luego de los incidentes en el bar.
El magistrado consideró que no había elementos suficientes para proseguir con la investigación penal, aunque la causa pasará a manos de la Justicia civil y comercial., por lo que el dueño del lugar aún podrá reclamar una compensación económica por los daños causados.
El propietario del establecimiento había denunciado a un grupo de jóvenes, entre los que se encontraba la estrella del Barcelona, por los destrozos provocados hace dos semanas en su local durante una pelea.
El incidente ocurrió el pasado 19 de enero. La disputa se habría originado cuando Messi y unos amigos, identificados con el club Newell's Old Boys, se insultaron con otros jóvenes, aparentemente de Rosario Central, lo que habría terminado en un enfrentamiento que incluyó la rotura de vidrios, botellas y muebles del lugar.
