El gol del triunfo trasandino lo marcó Fabian Orellana en la primera parte y aunque el partido se resolvió por la mínima diferencia, los locales, que desperdiciaron varias chances de gol, fueron los justos ganadores. Chile, impulsado por la multitud que colmó el Estadio Nacional, tomó la iniciativa y, fiel al estilo de su entrenador, eligió explotar las espaldas de los laterales Javier Zanetti y Gabriel Heinze, quienes se pararon casi en la mitad de la cancha para ayudar al desbordado mediocampo albiceleste.
El mejor de la zona media argentina fue Cristian Ledesma, quien robó y colaboró en ataque ante la intrascendencia de Lionel Messi, quien apareció en cuentagotas. Al minuto de juego Chile avisó con un remate en forma de centro de Jean Beausejour que Juan Pablo Carrizo sacó al córner con lo justo. Argentina no podía hacerle llegar la pelota a Messi y por eso sus avances eran o bien centros para Diego Milito o pelotazos para Sergio Agüero. Ambos delanteros tuvieron movilidad, pero les faltó conexión entre ellos para ocasionar alguna chance de peligro.
La única jugada de riesgo de la primera etapa se produjo a los 28. Messi se asoció con Agüero en tres cuartos de cancha y llegaron tocando hasta el área. Allí el arquero Claudio Bravo salió rápido y neutralizó el intento del delantero de Barcelona.
Chile era mejor por el empuje que ejercían sus jugadores en campo contrario, porque Matías Fernández gravitaba cada vez más en el partido.
A los 35 Gary Medel llegó al fondo por derecha y sacó un centro atrás que Fabián Orellana, sin marca, empujó al fondo del arco. En los minutos finales del período inicial Chile justificó la ventaja y hasta pudo aumentar con un derechazo de Humberto Suazo que se fue al lado del poste izquierdo.
El inicio del complemento no ofreció modificaciones. Chile, dominando el balón, y Argentina, sin ideas, atacando con pelotazos que no llegaban a destino. A los 7 Suazo se juntó con Matías Fernández sobre el costado izquierdo, edificaron una pared y el delantero remató, la pelota pegó en Martín Demichelis y se fue al lado del palo derecho. Diez minutos más tarde Carlos Carmona trepó por derecha y sacó un bombazo que rechazó hacia el otro lado del área Carrizo. El rebote lo tomó Hugo Droguett y sacó un zurdazo que Daniel Díaz rechazó con lo justo en la línea.
El local siguió dominando a voluntad y el partido se jugó casi siempre en campo argentino. Suazo y Fernández fueron los protagonistas estelares de la noche. Argentina no tuvo respuestas ni físicas ni futbolísticas y tampoco las encontró con los ingresos de Gonzalo Bergessio y José Sand. Messi siguió apagado y bien tomado por los volantes y defensores chilenos. La única del rosarino en esa parte final fue a los 37, cuando hizo una diagonal de izquierda a derecha, entró al área, se la picó a Claudio Bravo y Medel salvó en la línea. Fue la única llegada neta del equipo de Basile, que volvió a dejar muchas dudas en todas sus líneas y deberá mejorar si no quiere complicar su clasificación para Sudáfrica 2010.
Las siguientes fueron las formaciones iniciales:
Chile: Claudio Bravo; Gary Medel, Waldo Ponce, Pablo Contreras; Carlos Carmona, Marco Estrada, Jean Beausejour; Matías Fernández; Fabián Orellana, Humberto Suazo y Mark González. Director técnico: Marcelo Bielsa.
Argentina: Juan Pablo Carrizo; Javier Zanetti, Nicolás Burdisso, Martín Demichelis, Gabriel Heinze; Javier Mascherano, Cristian Ledesma, Esteban Cambiasso; Lionel Messi; Sergio Agüero y Diego Milito. Director técnico: Alfio Basile.
Estadio Nacional de Santiago de Chile.
Arbitro: Oscar Ruíz, de Colombia.
Fuente: DYN
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