También la atacaron a balazos. Sería
en venganza por el asesinato de un chico de 15 años,
por el que buscan a Diego "El Asesino"
Aguilera, hermano del líder de la barra de Godoy Cruz.
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Cedoc
Un grupo de personas intentó incendiar y tiroteó la casa de uno de los líderes de la barrabrava de Godoy Cruz en el Barrio Pablo VI de ese departamento mendocino, en una nueva derivación de las graves disputas internas en el seno de esa hinchada.
Según trascendió esta mañana por testimonios de vecinos, ya que hasta el momento la Policía no confirmó los hechos, los desconocidos habrían arrojado anoche una bomba molotov contra el frente de la casa.
Las primeras versiones dan cuenta de que el hecho podría estar relacionado con el asesinato de un chico de 15 años por el cual es buscado Diego "El Asesino" Aguilera, hermano de Daniel, líder de la barrabrava de Godoy Cruz.
De acuerdo a los testimonios recogidos por los medios de prensa, cerca de la una de la mañana desde un automóvil arrojaron la molotov contra el frente de la casa 16 de la manzana E del Barrio Pablo VI, donde vive la familia Aguilera.
Vecinos y efectivos policiales ayudaron a la familia Aguilera a sofocar rápidamente el principio de incendio. Otros testigos también aseguraron que, después de tirar la bomba molotov, los desconocidos efectuaron varios disparos contra el frente de la casa.
Diego Aguilera es buscado por la policía después de que la justicia lo imputara por el asesinato del joven Manuel Quiroga el último lunes.
Al parecer, los hechos que se vienen registrando desde hace varios días están enmarcados en una fuerte disputa que nació hace 15 días al momento de repartir las entradas que habría recibido la barrabrava para el partido del último domingo ante Argentinos Juniors, por la primera fecha del torneo Clausura.
Según fuentes cercanas al club, el enfrentamiento entre las facciones "La Gloria" que comandan los Aguilera y la "Chile" que se refugia en el barrio del mismo nombre donde fue asesinado el joven Quiroga, viene tomando temperatura desde el domingo y hasta el momento nadie parece poder frenarlo.
