ECONOMIA
Año difícil

La recesión y la crisis económica desde el punto de vista de 5 pymes

Propietarios de pequeñas y medianas empresas cuentan cómo atraviesan un 2018 turbulento. Tasas elevadas y cheques que se "revientan" a un costo altísimo.

Pymes_20181019
Las empresas ven caer su rentabilidad. | Cedoc

La caída del consumo interno genera un parate en la actividad de la mayoría de las 800 mil pequeñas y medianas empresas que hay en el país. Salvo por una minoría, que obtiene el grueso de sus ingresos en la exportación, gran parte de ellas vive gracias al consumo interno. PERFIL habló con propietarios de pymes para conocer cómo es el momento que viven y cuáles son los principales problemas que las aquejan: tasas elevadísimas, estiramientos en la cadena de pago, cheques reventados, falta de financiamiento, empresas grandes que se financian con ellas e insumos dolarizados son algunas de las batallas que enfrentan día a día los pequeños emprendedores.

"La semana anterior me llegó un pago de 90 mil pesos y necesitaba pagar salarios. Entonces, fui al banco a reventar el cheque, porque ya no los vendemos, los reventamos. Me pagaron 76 mil pesos y se perdió toda la rentabilidad", explicó a Ariel Aguilar, empresario y presidente Cámara Industrial de Manufacturas de Cuero y Afines.

Por su parte, Marcelo Barbani, propietario de una fábrica de equipos de refrigeración industrial, explica la situación de la siguiente manera: “Las pymes tenemos un desfasaje entre la cobranza y los pagos. Pagamos a 30 días y, como mejor opción, cobramos entre 60 y 90 días. Por eso, para ir solventando los gastos, solemos vender los cheques en los bancos a un interés normal, con lo que perdíamos un 2 o un 3%. Hoy, con estas tasas, en un pago que era a 60 días estás perdiendo casi un 10%".

"Hoy las pymes no estamos vendiendo los cheques, los estamos reventando".

Sin embargo, Barbani explica que hay un escenario aún peor y es tener que vender los cheques en cuevas: "Nos están pagando con cheques de terceros, de cuentas que no están en orden y que están en una mala situación frente al Banco Central, por lo que esos cheques no se puede negociar en bancos. Entonces, los terminamos negociando en cuevas y ahí nos están cobrando un 25% del valor por cheques a 60 días".

Barbani enfatiza que para su empresa es imprescindible vender los cheques antes de su vencimiento, para poder pagar salarios y costos del día a día, como por ejemplo la energía.

La recesión duraría un año y vaticinan una salida lenta desde mediados de 2019

Otro aspecto que dificulta la vida de las pymes es la dificultad para financiar proyectos de inversión. "A nosotros nos hubiese gustado poder pedir un crédito para invertir este año pero a una tasa del 70% anual es imposible, nadie tiene esa rentabilidad", añade Barbani.

En tanto, Delia Flores, propietaria de una compañía dedicada a los servicios aduaneros y el transporte de cargas, señala: "Conseguir un crédito en Argentina es prácticamente imposible. Un banco, para darte crédito, lo primero que mira es la rentabilidad de la empresa. Y las pymes, poco a poco, se van ahogando".

"Mis insumos son en dólares y yo vendo en pesos. La devaluación me mató", asegura un empresario.

Además, Flores pone el foco en cómo las empresas grandes se financian a través de las chicas: "Las empresas grandes se financian con sus proveedores, que son pymes. Y, a la inversa, las pymes, cuando hacen compras, tienen que adelantar sus pagos. Lamentablemente, las pequeñas empresas terminan accediendo, porque necesitan esos clientes".

En lo que refiere a cadena de pagos, la empresaria explica que no se ha cortado, pero que sí hay un estiramiento.

Inversiones paradas

"En CAME teníamos una estadística que indicaba que, a principios de año, había un 50% de pymes con intenciones de inversión y hoy solo hay un 15% seguro de invertir y otro 15% que lo está evaluando. Parte de esto lo atribuimos a las altas tasas de interés, es muy difícil financiar inversiones con este nivel de tasas", señala el secretario de prensa de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Pedro Cascales.

"El Gobierno anunció e implementó líneas para descuento de cheques y capital de trabajo a tasas del 29% anual, en bancos oficiales. Pero esas medidas, más un fideicomiso de compañías de seguro, apenas representan un 5% de la deuda de las pymes en el sistema financiero, que llega a  490 mil millones de pesos", apunta Cascales y enfatiza: “Ni que hablar si sumás lo que está afuera del sistema financiero".

"La deuda de las pymes con el sistema financiero llegan a los 490 mil millones de pesos y ni hablar si sumás lo que está por fuera del sistema formal"

Consumo

Más allá de las dificultades de financiamiento, Damián Regalini, propietario de una empresa textil que fabrica medias, asegura que una de las claves de la crisis del sector es la baja del consumo. "Cae la facturación, se deprime la rentabilidad, no tenés ventas, apagás máquinas, empezás a bajar precios, terminás vendiendo al costo y empieza una estampida de precios a la baja", remarca. Para ilustrar la situación adversa, Regalini agrega: "Con las devaluación perdí plata, porque mis insumos son en dólares y mis ventas en pesos".

"Todos los días me entero de un colega que cierra o de un colega que despide. Hoy mi contador me contaba de un fabricante de hilados que cerró sus fábricas pese a tener toda las máquinas andando. Tiene pedidos pero no le rinde la ecuación. Le conviene más cerrar la fábrica que tenerla abierta", puntualiza el empresario.

El empleo

Los empresarios consultados no se vieron en la necesidad de despedir gente, pero sí confirmaron que hay colegas del rubro que lo están haciendo. Barbani, por ejemplo, explicó que hasta hace poco tiempo tenía 10 empleados pero que se fueron cinco y que no pudo reponer ese capital humano. "Hace un año que no fabricamos ese equipos, que nos estamos dedicando a reparaciones", fundamentó.

Hay empresas pymes que no pueden pagar indemnizaciones y entregan máquinas a los empleados despedidos. 

Por su parte, Pedro Cascales señaló que desde CAME ven empresas que suspenden empleados y que reducen horas. “Todas se están achicando”, explica.

En esa misma línea, Ariel Aguilar señaló: "Algunos fabricantes de cueros que no podían pagar una indemnización les dijeron a sus trabajadores ‘te doy unas máquinas y me hacés unas carteras en tu casa’. Ahí nace un nuevo monotributista".

Los aspectos positivos

Delia Flores explicó que en materia de exportaciones está habiendo un cierto entusiasmo, producto de la devaluación. Si bien aclara "el tipo de cambio no soluciona todo" y "no es que se puede exportar de la noche a la mañana” considera que las medidas anunciadas por Dante Sica, en el marco del Plan Argentina Exporta son alentadores.

Por su parte, Pedro Cascales señala que las empresas vinculadas al turismo empiezan a mostrar resultados positivos y que están esperanzados de que una posible cosecha récord y Vaca Muerta traccionen a la economía.

JPA/EA