Los empresarios coinciden:
la mayor preocupación del Gobierno en materia económica debería ser “contener la
inflación”, reveló ayer un relevamiento del Instituto para el Desarrollo Empresarial
(IDEA) que demostró que las
expectativas económicas son pesimistas por primera vez desde la llegada del
kirchnerismo.
Para el estudio, se tuvieron en cuenta las
opiniones de 245 altos ejecutivos de empresas argentinas, de los cuales el 93%
afirmó que la inflación es el peor problema que enfrenta el gobierno de Cristina Fernández.
El dato demuestra que los empresarios argentinos desestiman las estadísticas del Indec, que
en lo que va del año informó una inflación acumulada que ronda el 5%, y se inclinan por creerle a
las consultoras privadas, cuyas cifras hablan de un aumento general de precios de alrededor del 15%
en lo que va del 2008.
Del total de encuestados, sólo el 5% opinó que la situación de la primera mitad del año había
sido “moderadamente mejor” que en el período anterior,
mientras que un 40% se inclinó por la opción “moderadamente peor”. El
55% restante opinó que “no hubo cambios”.
De todas maneras, según el informe de IDEA,
el voto “no positivo” del vicepresidente Julio Cobos a las retenciones móviles
modificó radicalmente las expectativas empresariales para el próximo semestre y generó una
oleada de optimismo entre los hombres de negocios.
Mientras que hasta el 17 de julio los optimistas habían sido apenas el 15%, tras el
“no” a las retenciones el porcentaje de empresarios que mejoró sus expectativas subió
al 34%. De la misma manera, los pesimistas bajaron del 43% al 29%.
Fue también a partir del conflicto con el campo que los empresarios comenzaron a darle
importancia a “solucionar conflictos sectoriales”. El 58% de los encuestados lo
mencionó entre las que deberían ser la prioridades oficiales.
Las
perspectivas para el año que viene son malas en una variedad de rubros: el 38%
prevé una disminución en su inversión, un 39% una disminución en las ventas y un 31% una caída en
las exportaciones.
"Las empresas tenían ganancias extraordinarias y estas ganancias se fueron normalizando.
El problema es a la hora de decidir una inversión para los próximos 5 o 10 años",
señaló Bernardo
Kosacoff, director de la oficina local de la CEPAL, durante la presentación de los
resultados.