ECONOMIA
inflación recargada

El consumo apuesta a las ofertas para competir con las tarifas en diciembre

Los economistas estiman que las subas en servicios públicos aportarán hasta un punto al IPC. Los supermercados y comercios van por las promociones para tratar de salvar el año.

1118_ventas_supermercados_gp_g.jpg
Los economistas estiman que las subas en servicios públicos aportarán hasta un punto al IPC. Los supermercados y comercios van por las promociones para tratar de salvar el año. | G.P.

La perspectiva de que las subas de tarifas anunciadas esta semana le sumen un punto más a la inflación preocupa a los sectores de consumo masivo que, si bien mejoran en ventas, no llegan todavía al nivel de 2015.

Según los economistas, un aumento del 40% de gas y de un 43% en luz para la región metropolitana –de consumo más intensivo en los meses de calor– le puede agregar hasta un punto a la inflación de diciembre. Y si bien el Banco Central tiene previsto seguir adelante con la absorción de pesos, incluso en un mes de aumento estacional del consumo, los sectores que aspiran a salvar un poco el año saben que la competencia por el bolsillo será dura.

En ese contexto, fuentes del sector supermercadista señalaron que algunas de las cadenas ya empezaron con promociones para los productos de Navidad y verano de congelamiento de precios al mismo nivel en el que estaban el año pasado.  Otras cadenas apuestan con promociones a principio de mes para que se puedan adelantar las compras de Navidad “al mejor precio posible” y también adelantar compras de verano como productos de jardín y textiles. En el caso de Navidad, apuntan a las categorías de juguetes y almacén, con cajas para el brindis o por separado.

De acuerdo con un análisis de Ecolatina, los ajustes de tarifas seguirán demorando el cumplimiento de las metas de inflación. Para este año se prevía un tope del 17% que ya fue superado.

“Y en 2018, los aumentos de tarifas volverán a impulsar la inflación por encima de la meta oficial (con un techo de 12%). El desmantelamiento del atraso tarifario continuará siendo el principal factor que explique el desvío de las expectativas oficiales de inflación en 2018. Teniendo en cuenta la trayectoria del tipo de cambio, las tarifas públicas y los salarios de la economía, proyectamos una inflación en torno al 17% anual para el próximo año”, según estimó la consultora.

También el sector productivo espera que crezca el consumo para aumentar la producción. Así lo señalaron representantes del sector industrial ante la presentación de los proyectos de reforma del Gobierno. Si bien fueron muy bienvenidos por los privados, el interrogante que subyace es si todo el combo permitirá cumplir con la meta del 3,5% de crecimiento que se puso el Ejecutivo para el año que viene.

Esta semana el Indec dio a conocer las cifras de ventas en los supermercados que crecieron en septiembre un 1,5% respecto de igual mes del año pasado sin contar la inflación, lo que implica una mejora real y la segunda consecutiva. En el caso de los shoppings, las ventas crecieron un 7% contra el mes anterior mientras que de forma interanual lo hicieron un 24%, en línea con la inflación. En cambio, en el acumulado del año todavía están muy abajo, con una suba del 14% a la que hay que descontarle la suba de precios.

Las estadísticas que manejan en el sector supermercadista muestran que se mantiene una caída interanual de -3.3% en octubre, con un repunte de las ventas de supermercados que perdieron terreno en los últimos años contra los mayoristas y almacenes.

En tanto, crecen las unidades promedio en los tickets, que llegan al máximo de los últimos 22 meses, según marca un informe de Scentia.

Reclamos sociales. Una constante para los supermercados, que tendrán sus Jornadas anuales este martes, son los pedidos de organizaciones sociales de productos para las Fiestas.

A esta altura del año, mermaron esos pedidos. Estimamos que la mesa de diálogo que armó el Gobierno con las organizaciones sociales está canalizando esos pedidos y llega menos a cada uno de los supermercados de forma directa”, tanto de grandes movimientos sociales como de municipalidades, provincias e incluso a nivel nacional, recordaron en el sector.

Lo mismo sucede con las reuniones de “seguridad”, que también bajaron en comparación con el año pasado, cuando en este punto del año se reunían con los municipios para evitar eventuales saqueos.


El “efecto Argenta” en compras futuras

El éxito del voto Argenta en las elecciones puede ser un condicionante del consumo futuro de los sectores que se volcaron a ese financiamiento, según advierte un informe de Ecolatina.

“Hacia adelante, debe considerarse que los créditos Argenta facilitaron el gasto presente, pero quitan recursos en el futuro: quienes hayan tomado dichos préstamos percibirán un descuento en sus haberes (el máximo es del 30%) hasta cancelar todas las cuotas pactadas”, remarcan los economistas de la consultora fundada por Roberto Lavagna.

El monto no es menor: desde el relanzamiento del programa en abril se inyectaron créditos por alrededor de $ 52 mil millones en sólo seis meses. “Ello es el equivalente a 2,9% del consumo privado, o el 26% de las ventas de supermercados del período. En este sentido, y en línea con el objetivo del Gobierno, no es casual que en dicho período el consumo masivo también haya mostrado una recuperación”, remarcaron.

A partir de abril de 2017 el Gobierno impulsó los créditos a través del plan 60x60 (hasta $ 60 mil en sesenta cuotas) para jubilados y pensionados y la incorporación de beneficiarios de programas sociales, aumentando 12 veces los préstamos otorgados durante abril-octubre de 2016. El timing de la medida mostró una estrecha relación con el calendario electoral. Entre abril-octubre de este año, se otorgaron 2,5 millones de créditos: 45% para titulares de la AUH, 27% para jubilados y 18% para beneficiarios de pensiones.