ECONOMIA
Se reunieron con De Vido en Nueva York

Empresarios estadounidenses se mostraron muy preocupados por la crisis energética argentina

Mientras el Gobierno niega la crisis, el ministro de Planificación intentó seducir a los hombres de negocios del mercado hidrocarburífero con la eximición de impuestos que el Congreso aprobó la semana pasada.

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En el marco de una crisis energética que las autoridades gubernamentales insisten en desmentir, el ministro de Planificación, Julio De Vido, se reunió con empresarios del mercado hidrocarburífero en una de las actividades más publicitadas de la agenda oficial de la comitiva presidencial a Nueva York. Los hombres de negocios interrogaron al funcionario argentino sobre la verdadera situación de disponibilidad de energía.

La reunión tuvo lugar en el Waldorf Astoria, uno de los hoteles más importantes de Nueva York, ubicado a dos cuadras del famoso rascacielos Empire State. Además de los 55 empresarios norteamericanos, fueron parte de la reunión ejecutivos argentinos, como el dueño de Canal 9, Daniel Hadad.

Los empresarios estadounidenses, a su turno, hicieron varias preguntas, en general destinadas a conocer la verdadera situación de disponibilidad de energía, la política en materia de precios, los planes para transportes, la relación entre el Estado central y las provincias en materia de infraestructura y las posibilidades de la explotación petrolera off-shore.

También participó del encuentro el cónsul Héctor Timerman -que se desempeña casi como un embajador y realiza la labor de cabeza de delegación- y Julio Cobos, el gobernador mendocino y líder de los radicales K. Este último fue el representante de la provincias hidrocarburiferas argentinas.

Entretelones. Tanto Cobos como Hadad están alojados en el mismo hotel. Esta mañana, durante la hora de gimnasia matinal, se cruzaron entre flexión y flexión, y aprovecharon para ajustar detalles de la reunión, ya que el empresario televisivo estaría tentado en incursionar por los caminos del mercado hidrocarburifero.

El gancho que utilizó el gobierno para seducir a los empresarios fue la nueva ley que se votó la semana pasada, que exime de impuestos a las empresas del sector de hidrocarburos y que tanto urgía a las autoridades sancionar.