El cambio de ciclo político encuentra a Luis Pagani, dueño de la alimenticia Arcor y uno de los empresarios más importantes de la Argentina, en plena vuelta a los primeros planos de la rosca gremial empresaria, y también en el manejo diario de su compañía.
En los últimos días, la firma que factura unos US$ 3.400 millones por año, informó a la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, que Pagani ocupará, por decisión del directorio de la sociedad, el cargo de CEO de la empresa a partir del martes próximo. Si bien siempre mantuvo un control cercano del día a día de la gestión, ahora asumirá formalmente tras seis años con Osvaldo Baños y Juan Rodríguez en ese puesto. “Tiene 58 años y está pleno para seguir a full”, dijeron quienes lo conocen.
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En parte, el management de la empresa se prepara para por primera vez tener a un hombre propio en la Unión Industrial Argentina. Adrián Kaufmann, gerente general de la entidad, quien reporta directamente a Pagani y tiene a su cargo varias áreas de la firma, empezará a tener menos tiempo en su oficina cuando desde el próximo 22 de septiembre asuma como nuevo jefe de la principal central fabril del país. Otro ejecutivo clave, el encargado de asuntos públicos Agustín O’Reilly, también acaba de sumar responsabilidades al quedar a la cabeza de la Cámara de Comercio Argentino-Brasileña.
Antes de que asuma Kaufmann en la UIA, la central fabril hará una muestra de cierta independencia del Gobierno: mantendrá su brindis del Día de la Industria pese a que Cristina Kirchner hará otro y había sugerido que se levantara. Y no sólo eso: ya confirmaron su asistencia a Avenida de Mayo 1147 los candidatos presidenciales Daniel Scioli, Mauricio Macri, Sergio Massa e incluso Margarita Stolbizer. Habrá un único orador, Héctor Méndez, el hombre plástico que tiene mandato vencido y seguirá hasta dentro de dos semanas, cuando asuma Kaufmann.
