El impulso que Cambiemos había tomado en las internas de agosto, y que consolida este domingo con victorias en varias provincias, debilita la posición del peronismo de cara a la segunda mitad del mandato de Mauricio Macri.
El oficialismo se impone en provincias en las que no había ganado en agosto, como Chaco y La Rioja. Hay pocos gobernadores peronistas que quedan más o menos bien parados tras la elección legislativa de la jornada, pero en líneas generales, además de un triunfo de Cambiemos, lo que queda expuesto es un peronismo relegado y dividido, que tendrá que hacer una revisión de su estrategia si quiere ser un rival competitivo en los próximos años.
El salteño Juan Manuel Urtubey fue el primer gobernador peronista en reconocer la derrota. Aunque por una escasa diferencia, el macrismo le ganó a los candidatos de uno de los principales aspirantes a la Casa Rosada.
Quedó desacomodado también el chaqueño Domingo Peppo, uno de los “nuevos” en la liga de gobernadores, que perdió a manos del oficialismo, perjudicado por una lista pura del kirchnerismo que le sacó votos. El sucesor de Jorge Capitanich mastica bronca contra Cristina Kirchner. “Otra vez le pifió en la estrategia electoral, y nos provocó un daño enorme”, dijo a PERFIL uno de los allegados al mandatario provincial.
El entrerriano Gustavo Bordet no sólo no pudo revertir el resultados de las PASO. Cambiemos estiró la diferencia, que había sido de cinco puntos, a más de 12. Sufrió el pampeano Carlos Verna. Otros esperan el resultado final porque la diferencia es muy ajustada, como el chubutense Mario Das Neves. Alicia Kirchner fue derrotada, al igual que, al menos por ahora, el Movimiento Popular Neuquino.
De los peronistas, por ahora, el que queda bien parado es Sergio Uñac en San Juan, que logró una lista de unidad entre peronismo tradicional y kirchnerismo y retuvo su provincia. La ola amarilla fue frenada en Formosa, donde Gildo Insfrán volvió a ganar. Y en Santiago del Estero no le alcanzó al macrismo para imponerse contra el poder de los Zamora.
El conteo final depara un futuro incierto y bastante oscuro para el peronismo. Muchos de sus dirigentes tienen aspiraciones, pero las urnas los castigaron. Inclusive los bonaerenses quedaron bastante lejos, como Florencio Randazzo y Sergio Massa.
¿Quién se posicionará para competir contra el macrismo en 2019? ¿Será posible la unidad entre peronismo y kirchnerismo, con el massismo, para generar un espacio competitivo? Esas preguntas se hacen varios referentes del PJ ante una clara victoria nacional de la Casa Rosada.
