Un músico que hace reír

Regordete y poco agraciado, Jack Black logró, gracias a su simpatía y versatilidad, convertirse en un galán poco convencional de Hollywood. En El descanso, el film de Nancy Meyers recién estrenado en la Argentina, demuestra que no hace falta tener el perfecto rostro de Jude Law o la silueta de Colin Farrell para robarse la película. Si bien en esta ocasión deja de lado el humor para volcarse a la comedia romántica, el protagonista de King Kong no pudo despegarse de su otra pasión: la música. Al igual que en Alta fidelidad y en Escuela de rock, en esta historia Black también hace uso de sus dotes musicales. Pero esta vez, ya no será para hacer reír al espectador, sino para conquistar el corazón de la bella Kate Winslet.

—¿Es cierto que aceptó este papel porque quería hacer una película que su madre pudiera disfrutar sin ruborizarse?
—¡Sí! Este es el estilo de filmes favoritos de mi mamá. Una historia de amor, con sentimientos dulces y llena de emociones.

—La música tiene un papel muy importante en esta película y también en su vida, como integrante de una banda. ¿Fue una buena combinación?
—Fue un gran papel para mí porque estoy familiarizado con el mundo de los compositores fílmicos. Muchas de mis películas están relacionadas con la música. Ese es mi mundo.

—¿Cuál es la escena de “El descanso” que más le gusta?
—La del piano. No es mi instrumento, yo toco la guitarra. Por lo tanto, tuve que practicar un montón. Había estudiado piano cuando era un niño y tocaba el tema de La Pantera Rosa. Luego, todo fue ¡rock and roll!

—¿Cómo describiría a Kate Winslet?
—Es grandiosa y, sin dudas, una de las mejores personas con las que he trabajado. Es tan creíble cuando pronuncia sus líneas que a veces me perdía. Le preguntaba: “¿Estás actuando?”

—Kate dijo que se le hacía muy difícil mantenerse seria cuando estaba frente a usted...
—Perdón, Kate, si hice que te perdieras. Es que adoro hacer reír a la gente.

—En una escena, está eligiendo películas en un negocio y las explica con sus cortinas musicales. ¿Cuáles son las cortinas musicales que más le gustan?
—Mis preferidas son un poco más espeluznantes. Adoro las de las películas de Stanley Kubrick, como El resplandor y La naranja mecánica. La música es muy importante porque puede construir o destruir una película.

—¿Y qué tipo de soundtrack eligiría para definirse a sí mismo?
—Alguno con guitarra eléctrica. Creo que elegiría Back in black, de AC/DC.