España pidió apoyo
para enfrentar esta amenaza que parecía estar relegada a los libros de aventuras.
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Cedoc
El secuestro del buque atunero español encendió las luces de alerta: los piratas, una categoría delictiva perteneciente al pasado, ha regresado.
Hace varias semanas, el episodio del crucero de lujo francés secuestrado por piratas conmovió al mundo a lo que se sumó la captura del buque español en estos días.
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"Espero que haya una acogida satisfactoria, que la Unión Europea se implique con Naciones Unidas en el combate de este fenómeno de la piratería", dijo el secretario de Estado español para Asuntos Europeos, Diego López Garrido, al llegar a una reunión de cancilleres de la UE en Luxemburgo, en la que presentó la cuestión. Al margen de su iniciativa en la UE, España también está impulsando la cuestión en la ONU, donde el lunes Estados Unidos y Francia entregaron un proyecto de resolución contra la piratería en el Consejo de Seguridad, explicó el funcionario.
Desde España consideran que no es un problema local, si no que se han afectado a naves de toda la Unión Europea. De hecho en 2007, más de 25 barcos fueron capturados en 2007 según la Oficina Marítima Internacional (OMI). La situación se complica al ser el interlocutor un estado que se enmarca en “fallido”, con un gobierno débil en donde los controles legales son casi inexistentes.
