La empresa en la que el protagonista trabaja no solo no se disculpó, si no que él replicó que su modelo de pico saludo fortalece la unión "como peces en el agua" y "proueve la solidaridad" entre los compañeros de trabajo.
Según informaron los medios occidentales, el hombre aseveró haber copiado esta práctica de la sociedad estadounidense y sus compañeras "aceptaron todas", excepto dos que decidieron renunciar.