Venezuela ha modificado los métodos que sigue la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) para enfrentarse a quienes deciden protestar en las calles. En uno de los párrafos de la nueva legislación se establece que se permite utilizar cualquier tipo de arma mortal contra aquellos protestantes más violentos. A partir de ahora se prohibe la retirada de pancartas, banderas e insignias.
Por otra parte sobresalen algunas medidas en las que se regula y limita el uso de la fuerza contra mujeres embarazadas, discapacitados y niños que huyen de las manifestaciones sin actuar de modo violento.
Hasta ahora no había criterios unificados en cuanto al proceder de las Fuerzas frente a estos hechos, sino que se actuaba según la sensación de peligro que cada responsable considerara más acorde. En la nueva ley no se hace distinción entre una manifestación violenta y una pacífica.
Lo que ya genera controversia es que en el texto redactado no se establece qué situaciones se consideran peligrosas para la vida de los demás ciudadanos. Las normas serán enviadas antes del mes de mayo para que los militares sepan cómo proceder, aunque desde el 27 de enero pueden ejercer su fuerza en las situaciones que se les presenten.
Las protestas en dicho país son un paisaje habitual desde febrero del año pasado, cuando un grupo de personas se instaló en las calles en reclamo de mayor seguridad y en contra de la escasez de productos de primera necesidad y el alza de los precios.
