Sri Satya Baba, de 84 años, que sufrió un paro cardio-respiratorio, según los médicos, indicaron medios locales, llevaba hospitalizado más de tres semanas en estado crítico en por problemas cardíacos, pulmonares y renales en su ciudad natal.
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Allí Baba poseía un "ashram" (comunidad espiritual) donde era visitado por fieles de distintos países y en algunas ceremonias relegiosas llegaba a aunar más de un millón de personas.
El gurú estaba considerado un dios viviente por sus seguidores -la mayoría indios de castas bajas del sur de la India- que le atribuían poderes sobrenaturales o presuntos milagros, como el de hacer aparecer objetos o curar enfermedades en fase terminal.
Sai Baba, sin embargo, cobró notoriedad fuera de la India por sus técnicas de meditación y sus aportes al yoga. Sin haber dejado una obra escrita tan intelectual y abunadante como Osho, Sai Baba ofreció un mensaje de "compasión, amor y paz".
En la Argentina, Sai Baba contaba con muchos seguidores y una de las más conocidas es la actriz y ex "chica Olmedo" Silvia Pérez.
