El analista en temas internacionales Andrés Repetto accedió a una entrevista con
Perfil.com para arrojar luz al tema que más preocupa a la región: el conflicto entre
Venezuela y Colombia y el cruce de acusaciones que le plantean a
Néstor Kirchner, como Secretario de la Unasur,
un rol clave en la negociación entre ambos países. Considera que
independientemente del organismo que se encargue de limar las asperezas que lastiman la relación,
los presidentes de la región "no se han expresado sobre qué van a hacer para solucionarlo" y
vislumbra un panorama sombrío de no llegar rápido a una solución.
"Lo preocupante es que tanto Colombia como Venezuela dicen manejarse con información que
tienen de inteligencia. Si esa información es cierta, los ha llevado a esto. Y si es es errónea,
también ha llevado a que Chávez movilice soldados y a Colombia a hacer la denuncia.
Es momento de poner paños fríos pero no es lo que están mostrando los líderes de la región.
Hay que empezar a solucionar el tema de fondo y dejar de poner la basura debajo de la alfombra. Si
no le damos solución al reclamo colombiano y a lo que está denunciando Venezuela puede que estos
países decidan actuar unilateralmente como lo hizo Colombia cuando bombardeó Ecuador", recordó
Repetto, en relación al conflicto que desató Uribe a principios de 2007.
"Kirchner es un secretario más de la Unarur. Esperemos que haga el mejor trabajo posible
no sólo para su carrera política -si hay alguna especulación en eso-. Es vital que a él le
salgan las cosas bien para que no haya una crisis impredecible en la región", añadió el analista.
"Si las organizaciones regionales -ya sea Mercosur o Unasur- no logran solucionar este
tipo de problemas,
el panorama es sombrío. Ya tuvimos en el pasado un bombardeo de un país a otro, vimos cómo
se impuso un golpe de estado ante la mirada de toda la región y ahora otra vez esto. El tema es que
lo empiecen a negociar y están pasando muchos días sin que los presidentes se quieran expresar
sobre qué van a hacer para solucionarlo", concluyó.
(*) de la redacción de Perfil.com