INTERNACIONAL
110 muertos, tres sobrevivientes

Recuperaron una caja negra del Boeing que cayó el viernes cerca de La Habana

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Imagenes. El siniestro conmovió a la isla. El presidente, Miguel Díaz-Canel, se reunió con familiares de las víctimas. | DPA

Las autoridades cubanas recuperaron ayer una de las cajas negras del avión que cayó el viernes poco después de despegar del aeropuerto de La Habana, y confirmaron que el accidente del Boeing 737-200 provocó 110 muertos y dejó apenas tres sobrevivientes: tres mujeres cubanas.
“Ya tenemos una caja negra en nuestras manos, en buenas condiciones, en buen estado de conservación, y la otra debemos tenerla en las próximas horas en manos de la comisión creada para analizar las causas del accidente”, dijo el ministro de Transporte cubano, Adel Yzquierdo Rodríguez.
“Tenemos claro el listado de pasajeros, lo vamos a publicar en las próximas horas”, agregó el ministro. De todas maneras, la comisión creada para la investigación de las causas del siniestro aún se encuentra trabajando en el lugar, ubicado entre el Aeropuerto Internacional José Martí y Santiago de las Vegas.
Mientras el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, se reunía con familiares de las víctimas en el Instituto Médico Legal de La Habana, su antecesor, Raúl Castro, advertía: “Se tomaron todas las medidas previstas ante este tipo de eventos, se investigan los hechos y se dará toda la información. No se dañó ningún centro, ni las viviendas”.

Sobrevivientes. Las tres jóvenes que lograron superar la tragedia fueron identificadas como Mailén Díaz Almaguer, de 19 años y de Holguín; Gretell Landrovell Font, de La Habana, de 23 años; y Emily Sánchez de la O, de 39 años. Esta última está consciente. Todas están en estado crítico y recibiendo atención médica especializada en el Hospital Universitario Calixto García, de la capital. El doctor Alberto Martínez Blanco, director del hospital, declaró que las pacientes “están siendo sometidas a todos los procesos de reanimación para mantener un estado hemodinámico”.
Hipótesis. La investigación está a cargo del Instituto de Aeronáutica Civil y el Ministerio del Interior, y ya se adelantó que será un trabajo “complejo”, agravado por las lluvias que cayeron sobre la zona del accidente. La hipótesis que se baraja es que el piloto habría querido regresar de emergencia al aeropuerto y que al girar se precipitó y chocó con cables de electricidad, según contaron testigos al diario Granma. Serán las cajas negras las que permitan confirmar estos testimonios.
El accidente aéreo ocurrió a las 12.08 del viernes, cuando el Boeing 737-200, arrendado por Cubana de Aviación a la mexicana Global Air, se precipitó a tierra en el momento del despegue. El vuelo nacional DMJ 0972 hacía el recorrido desde La Habana a Holguín, donde viajaban 107 pasajeros, entre los que se encontraban varios niños, un bebé y once extranjeros, entre ellos una pareja de turistas argentinos que vivían en Mar del Plata.