INTERNACIONAL
Elecciones en Paraguay

“Soy una línea media entre Chávez y Lula”

Fernando Lugo, el ex obispo que acaba de ser elegido presidente de Paraguay, negó un alineamiento con el mandatario venezolano y sostuvo que su país recorrerá “un proceso propio”.

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“Soy una línea media entre Chávez y Lula”, sostuvo el presidente electo de los paraguayos, el ex obispo Fernando Lugo, al intentar definir el lugar que ocupará su gobierno en la escena política latinoamericana, tras su asunción en agosto.

“¿Y no puede ser una línea intermedia, la de Fernando Lugo? Paraguay tiene que hacer su propio proceso. Creo que hoy en América Latina no hay paradigmas comunes unificados”, sostuvo el ex religioso en una entrevista con Univisión.

El oficialismo -representado por el Partido Colorado- denunció durante la campaña que el presidente Hugo Chávez había aportado fondos para asegurar el triunfo de Lugo y la semana pasada el actual presidente, Nicanor Duarte Frutos, afirmó que grupos de militantes chavistas se habían instalado en hoteles de Asunción para producir disturbios durante la jornada electoral.
Pero las elecciones finalizaron anoche sin que se registraran incidentes y tanto el presidente paraguayo como la candidata por el Partido Colorado, Blanca Ovelar, debieron reconocer públicamente la derrota del oficialismo.

La victoria de Lugo implica un histórico giro hacia la izquierda en Paraguay, país que durante los últimos 61 años estuvo gobernado por un hegemónico Partido Colorado que hasta respaldó la dictadura de Alfredo Stroessner, que duró 35 años.

Pese a las declaraciones del ex obispo, excomulgado “in divinis” por el Vaticano por su actividad política, la línea de Lugo parece tener más que ver con Chávez, el mandatario ecuatoriano Rafael Correa y el boliviano Evo Morales, que con el brasileño Luiz Inacio Lula da Silva.

Durante su campaña, Lugo anunció que llevaría a cabo una “reforma agraria acordada con los diferentes sectores”, aunque esto también había sido prometido por Lula en el 2002 y nunca se llevó a cabo.

Mientras tanto, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner fue la primera presidenta en felicitar a Lugo, a través de una carta.