POLICIA
El ADN a un puado de cabellos sera esclarecedor

Asesinato en Vicente López: el entorno, en la mira

La joven, hija de un acaudalado comerciante, fue estrangulada en el departamento donde vivía. Los investigadores creen que se trató de "un crimen pasional por celos" y tienen en la mira a personas de confianza.

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Solange Grabenheimer tenía 21 años y era hija de un acaudalado comerciante. Vivía en un departamento en la localidad de Vicente López, que alquiló con una amiga hasta el 10 de enero último. Esa mañana, después de las 8 alguien que por lo menos tenía la llaves de la casa entró y estranguló.

Casi un mes después de encontrar a Solange tendida en su cuarto, entre dos camas individuales, los investigadores apuntan todas sus teorías hacia el crimen pasional y aguardan los resultados del ADN a un puñado de cabellos que la víctima logró arrancarle a su agresor para saber la identidad de quien le quitó la vida.

El cuerpo tenía "marcas propias de un estrangulamiento", confió a perfil.com una fuente del caso. Sumado al hecho de que no faltaba nada de valor en la casa y que a Solange ni siquiera le quitaron el costoso reloj que llevaba en la muñeca, "todo indica que el homicidio fue pasional", añadió el informante.

El hallazgo. La joven fue hallada sin vida el pasado 10 de enero en un departamento ubicado en la calle Güemes al 2200 de Vicente López. El cuerpo fue encontrado por Lucía, la amiga que vivía con ella, estaba semidesnudo y boca abajo al costado de una cama.

Según fuentes policiales, la chica tenía cortes y puntazos hechos con un arma blanca y las marcas estaban rodeadas por líneas similares a las que se hacen en los tatuajes. Sin embargo, las marcas contundentes de estrangulamiento, no dejarían dudas de cómo fue el homicidio.

En cuanto a la investigación, trascendió que los cabellos que la joven tenia en una de sus manos y están siendo sometidos a estudios de ADN serían clave a la hora de descubrir al autor del crimen.

"Los cabellos serían comparados con el de una amiga y de un primo de la víctima", indicó la fuente señalando a dos personas del círculo más íntimo de Solange.

Si bien la joven tenía novio y hacía una vida normal -iba a la universidad y trabajaba con su papá en un comercio donde se colocan vidrios polarizados en la calle Warnes, en el barrio porteño de Villa Crespo-, fuentes de la investigación indicaron que "habría llevado una vida un tanto agitada, por lo cual el móvil del crimen podría ser pasional y no se descarta que  por celos”.

Por otra parte, los médicos legistas que vieron el cuerpo creen que quien entró al departamento tiene que ser una persona conocida de la víctima porque ninguna puerta o ventana fue forzada y ningún vecino sintió o vio nada extraño.

Ayer, el abogado de la familia de la víctima, Juan Carlos García Dietze, admitió que el autor del crimen es del círculo íntimo de la joven.