POLICIA

Crimen del turista francés: "Estuvo cerca de tiburones, ¿y muere en Buenos Aires?"

La hermana del fotógrafo Laurent Schwebel calificó de "absurda" la muerte. "No tiene sentido asesinar por una cámara de fotos", dijo.

Muerto por tomar una fotografía del monumento a los caídos en Malvinas.
| DyN

Christine Schwebel, hermana menor del turista francés asesinado al resistirse a un asalto en plena plaza San Martín, del barrio porteño de Retiro, calificó de "absurda" la muerte y consideró que "no tiene sentido asesinar a alguien por una cámara de fotos".

"Por su trabajo, él estuvo cerca de tiburones y de lobos, lo mandaron a lugares tan peligrosos como Libia o Siria... ¿Cómo es posible que haya muerto en Buenos Aires? ¿Por qué tuvo que ir ahí esta vez?", planteó. La hermana de Laurent Schwebel habló desde la ciudad de llkirch-Graffenstaden -de 26.000 habitantes, ubicada en la región de Alsacia, en el noreste de Francia-, donde vive la familia, y dijo que está "viviendo un mal momento".

"¿Usted me puede explicar por qué lo mataron? No tiene sentido asesinar a alguien por una cámara de fotos. No tiene ningún sentido... No lo puedo creer", señaló la mujer con la voz entrecortada por el llanto, según publicó hoy el diario Clarín.

Y recordó que Laurent "era muy jovial, siempre estaba muy feliz, le gustaba reír, le encantaba la vida, le encantaba compartir, amaba la vida...". El fotógrafo naturalista no estaba casado y no tenía hijos, pero estaba en pareja, agregó.

Ayer, alrededor de las 8.30, el hombre, de 52 años, fue apuñalado en el pecho por un joven que quiso robarle la cámara cuando fotografiaba el cenotafio que conmemora a los caídos en Malvinas. Schwebel caminó unos 20 metros y cayó malherido, pero murió a los pocos minutos, mientras que el presunto ladrón fue detenido.

Su hermana Christine recordó que Laurent -que había estudiado Geología- trabajaba para el "Consejo General Territorial", el órgano gubernamental del departamento del Bas-Rhin, que representa la mitad de la superficie de la región de Alsacia, cerca de Alemania. Era funcionario del servicio de medio ambiente, pero también hacía trabajos freelance para diarios y revistas. Sus viajes lo habían llevado a lugares tan disímiles como Groenlandia, el norte de Canadá o Kamchatka, consignó Clarín.

"Tenía pasión por la fotografía, sobre todo la de la flora y los animales. Le gustaba zambullirse en la naturaleza y el buceo. En cuanto podía, se iba de viaje para hacer fotos. Quería hacer reportajes sobre cosas muy variadas. Hacía poco se había ido al Polo Sur", manifestó.