Detienen a ‘la Yaqui’, la mujer que lideraba una banda de sicarios

Sandra Jaquelina Vargas Méndez, alias “la Yaqui”, fue capturada en un chalet de Cuchi Corral, rodeado de barrios privados, estancias y casas imponentes, a 10 kilómetros de la capital de San Luis. Pese a estar ubicada a pocos metros de la Avenida San Roque, en la localidad puntana de Juana Koslay, el acceso a la propiedad no es sencillo. Una calle de tierra que parece no tener destino definido llevó a unos treinta policías hasta el muro de ladrillos que protege la casa donde descansaba la Yaqui, una mujer acusada de amenazar de muerte a periodistas que la relacionaron con homicidios vinculados al narcotráfico.

En la puerta, los agentes encontraron estacionada la Toyota SW4 en la que se movilizaba la presunta líder de Los Angelitos, jóvenes sicarios de Godoy Cruz. Valuada en unos 600 mil pesos, la camioneta fue uno de los vehículos secuestrados en operativos simultáneos realizados en San Luis y en Mendoza por efectivos de la Brigada de Investigaciones de Mendoza, del Departamento de Informaciones, y del grupo especial COAR (Compañía de Operaciones de Alto Riesgo) de San Luis.

Tras dos meses de trabajo de inteligencia conjunto entre las fuerzas de seguridad de ambas provincias, los investigadores lograron dar con el lugar donde se refugiaba la Yaqui. Cuando reunieron todos los elementos, el fiscal de Godoy Cruz Juan Carlos Alessandra pidió la orden de detención que llegó por fax a la comisaría local.  

La Yaqui dormía con sus hijos, dos de ellos menores de edad, cuando entró la policía, alrededor de las 8.30 de la mañana de ayer. En la casa no había armas ni droga.

Vargas fue detenida junto a su hija, Silvina Gelvez. Ninguna se resistió al arresto ordenado por el Juzgado de Instrucción 2 de San Luis.

Mientras tanto, el hermano de Vargas, Carlos Guatón Vargas, fue capturado en otra propiedad ubicada en el barrio El Tala, al norte de la ciudad puntana. En Mendoza fue apresado Carlos “Junior” Vargas, sobrino de la Yaqui.

En total, fueron ejecutados diez allanamientos en el Gran Mendoza y cuatro en San Luis.

Vargas y su familia están imputados por “homicidio agravado por uso de arma de fuego en grado de tentativa contra una mujer de 60 años”, confirmó a PERFIL el ministro de Seguridad de Mendoza, Leonardo Comperatore. El funcionario aclaró que el clan también está siendo investigado por la Justicia provincial y federal por “otros homicidios, tentativas y otros delitos vinculados al tráfico de drogas”. La Yaqui “tiene varias causas abiertas”, agregó Camperatore.

Durante los allanamientos en Godoy Cruz, fuentes policiales indicaron que secuestraron un arma de fuego y, según trascendió, en una de las viviendas hallaron una cantidad de cigarrillos de marihuana no especificada.

El nombre de Jaquelina Vargas trascendió cuando el Ministerio de Seguridad mendocino dispuso custodia para tres periodistas del diario El Sol, ya que, según informes de Inteligencia, la mujer habría ordenado asesinarlos luego de publicar artículos que reflejaron una serie de crímenes vinculados al narcotráfico y a la guerra por el control del territorio.

La Yaqui, tras la notoriedad que tomó el caso, declaró de forma espontánea en una fiscalía para “demostrar la persecución irregular de la cual soy objeto”, escribió en la presentación a la que tuvo acceso PERFIL. Según la publicación, Los Angelitos de la Yaqui –compuesta por jóvenes y menores– llevaron a cabo una sangrienta venganza por el homicidio de su pareja, Cristian Gelvez, ocurrido el 18 de febrero pasado, durante un tiroteo que protagonizó en Campo Pampa, el barrio donde vive la familia.

“Nos cayó bien la detención. Confirma los datos que venimos publicando”, dijo a PERFIL Jorge Hirschbrand, director del diario digital. Tras las amenazas de muerte, la custodia dispuesta por la cartera de Seguridad se retiró de la puerta del portal mendocino. Los tres periodistas que fueron señalados en el informe de inteligencia tampoco cuentan con protección. Al respecto, Hirschbrand afirmó: “Confiamos en la Justicia. No tenemos miedo pero estamos atentos porque no sabemos por dónde puede llegar a venir la venganza”.

Silvina, la hija pistolera que sigue sus pasos, quedó presa, como su madre

La hija mayor de Jaquelina Vargas protagonizó una manifestación el 17 de febrero pasado en la puerta del diario Uno de Mendoza. Silvina Gelvez, de 20 años, quería hacer un descargo a favor de su madre y su familia, luego de que trascendieron las presuntas amenazas contra tres periodistas que los investigaban por una serie de crímenes ocurridos en la zona oeste de Mendoza. 

Ese día, Silvina estuvo acompañada por la suegra de la Yaqui, Nora Gatto. Ambas explicaron que no había pruebas de las amenazas y aseguraron que irían “hasta las últimas consecuencias” contra la División de Inteligencia Criminal que elaboró el informe. “No existen los angelitos ni los soldaditos. Esos son inventos”, sostuvo Silvina. “El año pasado nos hicieron 48 allanamientos y no encontraron nada, sólo nos rompieron las cosas y a veces hasta se llevaron algo (los policías)”, agregó y aseguró que su madre “vive de lo que vende en la rotisería”.

Pese a mostrarse inofensiva, el diario El Sol publicó fotos de su perfil de Facebook en las que se la veía portando armas de fuego y, tras el asesinato de su padre, Cristian Gelvez, escribió un mensaje intimidante en su muro: “¿Por qué les diste el gusto papi? Te lo juro papito me la van a pagar uno por uno. No va a quedar nadie vivo. Yo papi voy a vengar tu muerte, los voy a buscar cielo y tierra. A esos putos yo los voy a matar como ratas”.