Tras la renuncia de la magistrada Marcela López, hoy se hará cargo del caso de Lola Luna Chomnalez una nueva jueza: Silvia Urioste. Además, la fiscal Gabriela Sierra tomará el puesto de la saliente Soledad Barriola.
El viernes pasado, la jueza Marcela López Moroy, agobiada por las presiones, dejó la causa presentando un pedido de licencia por estrés. La magistrada actuó en el caso Lola como subrogante de la jueza de primer turno, Silvia Urioste Torres, quien tomará hoy el relevo en la investigación. Durante este intervalo fue la jueza de paz María Camacho quien se encargó de estar al frente de la causa, aunque se trató de una mera formalidad dado que no ordenó nuevos procedimientos.
A pesar de que Lola desapareció el pasado 28 de diciembre, la causa parecería estar en un punto muerto. Habría 4 líneas de investigación, 9 indagados que quedaron libres, ninguna prueba material y ningún culpable o nuevo sospechoso.
Fuentes cercanas a la causa aseveraron al diario El Observador que el caso “no está a cero”, a pesar de que parecería que la investigación está estancada. Se espera que a lo largo del día de hoy el Ministerio del Interior realice una conferencia de prensa para brindar más detalles sobre el nuevo rumbo a seguir con la asunción de la nueva jueza.
Lola Luna Chomnalez, de 15 años, fue hallada muerta el 30 de diciembre pasado luego de estar dos días desaparecida a unos 150 metros semienterrada en la playa, entre los balnearios de Aguas Dulces y Barra de Valizas. La adolescente había ido a pasar el fin de año con su madrina Claudia Fernández, el marido de ésta, Hernán Tuzinkevich, el hijo de él y una hija de la pareja a una casa de veraneo. Según la autopsia, Lola fue asfixiada contra la arena y sufrió algunos cortes superficiales de arma blanca.
