Por más de cuatro horas un policía mantuvo a 11 personas como rehenes en una oficina municipal de Neuquén. El motivo sería presuntamente por “problemas con su actual pareja", según informó el subsecretario de Seguridad provincial, Gustavo Pereyra.
El cabo Sebastián Riquelme irrumpió alrededor de las 8.40 en las oficinas donde se gestiona la renovación del registro de conducir, ubicada en el barrio Provincias Unidas de la capital neuquina, y tomó como rehenes a empleados y personas que hacían sus trámites en el lugar.
Entre las rehenes se encontraba Carla Tamburri, de 30 años y embarazada de 12 semanas, quien aparentemente fue hasta hace poco tiempo su pareja. Ella salió en la primera liberación de víctimas pero al poco tiempo reingresó para tratar de convencer sin suerte a su ex. Según informó Pereyra, la reacción de Riquelme estaría relacionada con "problemas con su actual pareja".
El cabo de la Policía de Neuquén presta servicios en la comisaría cuarta de la capital provincial y realiza habitualmente trabajos adicionales en la dependencia municipal donde tomó rehenes, detallaron fuentes policiales. Los voceros policiales también revelaron a medios locales que el hombre tendría antecedentes de violencia doméstica contra una pareja anterior, motivo por el cual tuvo que realizar un tratamiento psiquiátrico.
Riquelme fue trasladado al Hospital Castro Rendón de Nequén, donde se le realizarán pericias psicológicas. Según informó DyN, fuentes judiciales dijeron que aún no se ordenó su detención ni el inicio de una causa penal, ya que eso dependerá del resultado de las pericias.
