POLICIA

Crimen del empresario español: tres sospechosos, un plan torpe y cabos sueltos

Para los investigadores, el caso está prácticamente esclarecido.

0128_sospechosos_crimen_g
Sospechosos crimen | Captura de TV

Para los investigadores, el crimen del empresario de la construcción Roberto Fernández Montes está casi esclarecido. Sólo resta probar el papel que cumplió el mecánico César Ricardo Arce López, empleado de la víctima, que tenía un vínculo más aceitado con Santiago Corona, considerado el autor intelectual del crimen.

Querían simular un secuestro o una desaparición”, destacaron los investigadores. Fuentes de la causa indicaron a PERFIL que Arce López habría sido el nexo entre el yerno de Fernández Montes y el carnicero Pedro Fernández Torres. El mecánico y el carnicero “se conocen del barrio.

Son compinches. "El mecánico tiene un pedido de detención por falsificación de documentos y creemos que cortaba autos. Lo habrían contactado para que mate al empresario”, afirmaron.

Esto no le gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Creen que el yerno le facilitó las llaves del departamento a Fernández Torres. El carnicero, que es buscado intensamente, habría esperado en el departamento la llegada de la víctima. “Fue el ejecutor”, indicaron. Corona, por su lado, habría prestado “la logística”. Se investiga cuál era la ubicación del mecánico en el momento del crimen.

Corona es, claramente, un psicópata con acentuados rasgos antisociales. Estos individuos son impulsivos y comenten groseros errores en la planificación de su futuro”, dice el perito Miguel Maldonado sobre el yerno. “Con respecto a los otros dos integrantes del trío letal, sólo puede decirse que eran propensos al delito (tenían antecedentes delictivos menores), aunque su escaso cociente intelectual los hace material apetecible para emprender cualquier aventura”.

El sábado 21 de enero, Corona llegó a su casa de la calle Senillosa al 300, alrededor de las 14.30, se sacó la ropa y la lavó. Lo contó su mujer al juez, Hernán Martín López, quien ordenó allanar la casa de Corona para secuestrar la ropa que estaba en el tender. Espera obtener algún resultado de la camisa clara de mangas cortas y el jean con los que el sospechoso aparece en los videos de la causa.