“Lo mataron por la espalda, no le robaron el dinero que tenía encima, sólo faltaba el celular. Nosotros estamos esperando que el tema se esclarezca porque nos llama mucho la atención”, señaló el sindicalista ante la consulta de Perfil.com.
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Con respecto a si la muerte de Andrada está relacionada con su condición de testigo clave en el juicio que investiga el juez Bonadío, Sobrero tomó ciertos reparos: “No queremos dar nada por sentado porque la verdad no lo sabemos. Sólo podemos decir que es muy llamativo lo que pasó y pedimos que es investigue el caso”, disparó.
Quien también dio declaraciones fue Edgardo Reynoso, otro delegado de Unión Ferroviaria que señaló que se enteraron ayer al llegar al trabajo. "Salió de la casa de la mamá y le dispararon", dijo Reynoso y agregó: "Al principio aparentaba un robo, pero tenía el dinero encima, sólo le faltaba el celular. Hasta ahora es todo lo que supimos".
"Era un hombre excelente en el trato", dijo Reynoso en una entrevista a TN. "No mereceía tener ese final".
