Emilio Otero, el padre Jonatan, el chico que murió luego de ser apuñalado en el aula de un colegio
secundario de la localidad bonaerense de Villa Gesell, aseguró que su hijo “
no era un chico violento” y que en varias oportunidades
había sufrido agresiones en la escuela.
"Mi hijo sufrió un montón de veces agresiones y ante esas agresiones se defendía como podía.
La escuela, que tiene asentadas un montón de denuncias por peleas, corridas y roturas de vidrios,
hacía la vista gorda", señaló el hombre durante el velatorio de su hijo, según
consignó
El Día de La Plata.
Además, el hombre agregó que Jonatan "había pasado del turno tarde al de la noche por orden
del vicedirector del colegio, después de haber sido agredido en otra oportunidad por un grupo de
chicos".
"Voy a llegar hasta las últimas consecuencias y si la escuela es responsable de esta
muerte, va a tener que hacerse cargo", agregó Otero.
Por su parte, fuentes municipales y educativas bonaerenses aseguraron que la víctima y su
agresor, un compañero de estudios, habían tenido "
peleas con otros chicos".
Jonatan tenía 19 años y murió tras sufrir dos cuchillazos que le aplicó un compañero de 17.
Voceros policiales detallaron que el episodio comenzó a las 22.45 del jueves en un aula del colegio
1 de educación Media.
Según los primeros testimonios, los estudiantes comenzaron a discutir en medio de una clase.
De inmediato, el profesor logró calmar a los alumnos, al pedirles que realizaran algunos
ejercicios. Pero a los pocos minutos, uno de los estudiantes arrojó al otro el papel en el que
efectuaba la tarea, tras lo cual empezaron a cruzar trompadas y patadas.
El profesor salió del aula a gran velocidad para pedir ayuda a autoridades del gabinete
psicopedagógico del colegio. Cuando regresó con los especialistas, encontró al estudiante de 19
años en el piso, ensangrentado. Si bien el arma no fue hallada aún, se estima que por las lesiones
se había usado un cúter.
Este caso fue el segundo episodio de violencia en un aula que deriva en la muerte de un
alumno. En una escuela de la ciudad bonaerense de Carmen de Patagones, en 2004, un
estudiante de 15 años mató a balazos a tres compañeros y provocó heridas a otros seis.
No fue un caso aislado. El caso de Jonatan no fue el único episodio de agresión
con arma blanca entre compañeros de colegio esta semana. En Rosario, un chico de 14 años fue herido
de dos cuchilladas en una pelea entre adolescentes en la esquina de un colegio. La víctima fue
trasladada al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez y los agresores fueron detenidos.
En Tucumán, un chico de 14 años fue apuñalado y golpeado a la salida de un colegio. El
adolescente se había escapado de clases cuando tres compañeros, que no fueron identificados, lo
interceptaron en el camino.