La Asociación Civil Abuelas de Plaza de Mayo recuperó hasta el momento 118 nietos. Cada uno con una historia particular que tienen en común haber nacido durante los peores tiempos políticos de nuestro país y haber sido apartados de su familia biológica. El shock emocional y psicológico que representa constatar que son hijos apropiados por la dictadura militar golpea de forma diferente a cada uno de ellos. Tras el primer impacto, empieza un proceso judicial que implica el juicio a sus apropiadores así como la destrucción de su partida de nacimiento y restauración de su nombre.
Hilario Bacca es el nieto número 95 y se encuentra en una batalla legal para conservar el nombre y apellido con los que vivió toda su vida. Una posición que se contrapone a la que defienden desde Abuelas de Plaza de Mayo.
Consultado por Perfil.com sobre el caso de Hilario, el abogado de la entidad Alan Iud explica que “en atención a que el acta de nacimiento es de contenido falso, se solicita que la misma fuera anulada y se efectúe su inscripción de acuerdo a lo que dispone el Código Civil”. “Abuelas no impone el orden de los nombres de pila ni los apellidos, eso es a elección de ellos”, precisa, aunque puntualiza que la partida de nacimiento “no puede ser modificada por la voluntad personal”.
“Nuestra posición es lo que dice la ley. La ley no contempla una posibilidad como la que plantea Hilario, de todas formas si tiene a su alcance los recursos legales para hacer un planteo que crea pertinente, que lo haga”, sostiene Iud. Y amplia: “Muchas veces la cuestión de nombre y apellidos es problemática en nietos que conocen su verdadera identidad. Algunos tienen una negativa total a modificar sus apellidos, otros quieren hacerlo lo más rápido posible, es una situación que depende de cada caso de cada historia”.
El abogado de Abuelas opinó que el caso de Hilario Bacca no sentará un precedente para la institución ni para la sociedad dado que “la Justicia en tres instancias distintas rechazaron su planteo”. Y diferenció su caso de otros que ha tratado: “Lo que sí ha sucedido en otros oacasiones es que no hay una partida de nacimiento falsa sino una adopción, por lo que conservaron el nombre adoptivo”.
Cuestionado sobre si tras casos como el de Hilario Bacca la institución se replantea algunos procedimientos como el de garantizar ciertos derechos a las familias de los nietos recuperados o a ellos con la cuestión del cambio de nombre, argumenta: “La posición de Abuelas ha sido siempre de que la Justicia actúe y se aplique la ley tanto respecto de las responsabilidades como en referencia al nombre, si esto incide en que sea mas difícil la restitución de otros nietos es algo que se puede considerar pero la posición siempre fue la misma y seguirá así”. Y concluye: “Se rechaza dar impunidad a cambio de información”.
(*) De la redacción de Perfil.com | Twitter: @BarbaraDefoix
