Después de dos días de silencio, el gobernador de Tucumán José Alperovich salió a desmentir la denuncia radicada en la Justicia bajo la figura de malversación de fondos públicos por un supuesto pago de reparaciones a la casa de su hija con plata del Estado. "Tengo las manos limpias", lanzó.
Todo surgió el fin de semana, cuando se conoció el testimonio de un empresario de la construcción al que, después de refaccionar la casa de Mariana Alperovich -hija del gobernador-, le ofrecieron cancelar la deuda con pagos a nombre de la Dirección de Arquitectura y Urbanismo de la Provincia (DAU).
Sus declaraciones al diario La Gaceta llegaron a la Justicia de la mano de la senadora radical Silvia Elías de Pérez, quién denunció al gobernador por malversación de fondos y negociaciones incompatibles con su función. "Alperovich no diferencia entre su patrimonio y la plata de la provincia", le dijo ayer la legisladora a Perfil.com. "Veníamos señalando a la DAU como una de las grandes cajas de Alperovich", explicó.
Durante los dos días siguientes de efectuada la denuncia, el gobernador no hizo pronunciaciones públicas al respecto e instruyó a su equipo para no responder preguntas de la prensa. Hoy, durante un recorrido programado por obras en su provincia, salió a cruzar a la oposición cuando fue consultado por el tema. "Hay gente que nos pone muchos palos en la rueda, se mete con mis hijos, ya no saben qué hacer", dijo.
"Tengo las manos limpias, no robé y trabajé con transparencia. La oposición sobrepasó los códigos, sólo quiere manchar mi apellido", continuó. "Tucumán es chico, quisiera que le pregunten a cualquier proveedor del Estado si este gobernador alguna vez les pidió un peso", concluyó.
La denuncia está basada en un contratista del Estado que, diferente a lo que sostiene Alperovich, dijo que las autoridadades de la DAU le pidieron que trabajara en una casa particular del gobernador para cancelarle pagos con fondos públicos.
Según supo Perfil.com, Alperovich tomó cartas en el asunto y designó rápidamente al legislador y abogado Marcelo Coponio para defenderlo públicamente. "A ese contratista se le facturaron cinco veces por un total de 60 mil pesos", contó, en diálogo con este portal. "Si se le debía un pago, y el caso se remonta a 2010, ¿por qué no hizo la denuncia por las vías correspondientes?", siguió.
Sobre la demanda presentada ante la Justicia por la senadora opositora, Coponio dijo que "es absurda, es ridícula, porque lo mínimo que uno tiene que tener son pruebas y, la verdad, lo único que tiene es una noticia periodística con un testimonio".
"Ese contratista, el señor Villafañe, colocó un durloc y lozas, ¿cuanto puede costar eso? Porque la hija del gobernador le pagó 60 mil pesos", continuó. Y remató: "¿Alperovich va a ser una maniobra como esta por esa cifra? Es una locura, esto es una maniobra política para perjudicarlo".
